La Vicesecretaria General de UGT, Cristina Antoñanzas, pone en valor, durante una asamblea de trabajadores y trabajadoras en Galicia, los últimos acuerdos alcanzados desde el Diálogo Social, “fundamentales para seguir avanzando en la igualdad entre hombres y mujeres”

Acuerdos como los ERTE, “donde se protegió el empleo de 3,5 millones de personas, muchas de ellas mujeres; o la ley de trabajo a distancia, donde por fin se ha abordado una legislación que supera la teoría de que teletrabajar es conciliar, porque no lo es, aunque muchas empresas aún no se hayan dado cuenta”.

Acuerdos como los dos reales decretos “de planes de igualdad y registro retributivo, que avanzan hacia la igualdad efectiva entre hombres y mujeres y gracias a los cuales tendremos una fotografía clara y concreta de lo que sucede en las empresas; o la valoración de los puestos de trabajo de una empresa, un antes y después en la valoración de las clasificaciones profesionales en las empresas, para conseguir ya la máxima de “igual salario para trabajos de igual valor”. 

Medidas que, para Cristina Antoñanzas, “son fundamentales para las mujeres de este país. A partir del 7 de marzo ya es obligatorio que todas las empresas de más de 50 trabajadores y trabajadoras tengan un plan de igualdad, pero esto sucede en un 20% de las empresas solo, 4.500 empresas, por lo que “el debe” aún es muy importante”.

SMI y Reforma Laboral, fundamentales para aumentar los derechos de las mujeres

Para la Vicesecretaria General de UGT, el acuerdo para la subida del SMI también ha sido de gran valor para avanzar en igualdad. “La subida del salario mínimo supuso un descenso en 2 puntos de la brecha salarial en 2019. La gran mayoría de las personas que lo cobran son mujeres. Los salarios precarios son para las mujeres en este país. El SMI ha subido desde 2019, por lo que irá descendiendo la brecha salarial”.

Y la nueva reforma laboral, “fundamental con los cambios en la contratación, acabando con la temporalidad y situando el contrato indefinido como general”. Además, ha puesto en valor tres elementos de la reforma que inciden en mayor medida en beneficio de las mujeres: “la recuperación de la ultractividad, ya que las mujeres no verán disminuidos sus salarios al decaer el convenio; la recuperación de prevalencia del convenio de sector por encima del de empresa; y la modificación del art. 42 del Estatuto de los Trabajadores, donde las contratas y subcontratas tendrán que aplicar el convenio del sector de la actividad que realizan, que posibilitará que las mujeres puedan cobrar hasta 7.000 euros más al año”. 

Para Cristina Antoñanzas, todos estos acuerdos, junto a la llegada de los fondos de reconstrucción de la Unión Europea, “van a tener un gran impacto en la mejora de las condiciones de trabajo de las mujeres, reduciendo las brechas de género e impulsando la igualdad en nuestro país”. 

► Audio de Cristina Antoñanzas en la rueda de prensa previa a la asamblea de Galicia