​UGT Juventud rechaza frontalmente la justificación que esgrimen ciertos empresarios para justificar abusos laborales e insta a que se actúe de una vez contra las prácticasfraudulentas que enmascaran relaciones laborales precarias.

Una vez más, hemos tenido que escuchar como se justifican los abusos laborales contra la  juventud. Si bien es cierto que hay que distinquir entre las becas curriculares, aquellas quese realizan dentro de unos estudios, de las extracurriculares, aquellos contratos laborales que se realizan para quienes ya terminaron sus estudios.

Así, las becas extracurriculares deben ser formalizadas mediante el contrato propio y se deben de cumplir las condiciones laborales del sector con algunas peculiaridades que sepermiten para este contrato y que se recogen en el Estatuto de los Trabajadores.

Las becas curriculares, sin embargo, son aquellos trabajos que se realizan en una empresa con la finalidad de ir adquiriendo algo de experiencia laboral pero en cualquier caso se encuentran dentro de unos estudios. Estas prácticas en ningún caso deben de de sustituir propuestos de trabajo, sino que se trata de vincular a un estudiante a un tutor dentro del mundo laboral para que le oriente sobre las funciones que realiza.  Pues bien, ambas fórmulas de prácticas son utilizadas por numerosas empresas paraahorrarse puestos de trabajo y, en todo caso, salarios que le corresponde a esa persona.

La  clave para que puedan afianzar este abuso, es la incapacidad de quien es explotado quien siente que si reclama será despedido e incluso no se le dará la titulación.

Por último, reivindicamos que toda la sociedad tome conciencia de esta situación y rechace radicalmente toda justificación que se quiera hacer sobre estas fórmulas de falsas prácticas que enmascaran la explotación de las personas jóvenes.