UGT reclama una mesa específica de diálogo social en materia de discapacidad

El sindicato reclama la mejora de la calidad de vida de las personas con discapacidad con medidas que impulsen la inclusión social y laboral plena a través de un empleo de calidad, una formación adecuada, y la consecución de la accesibilidad universal.


Las políticas de discapacidad han sufrido durante años un estancamiento, en parte, eclipsadas por otras prioridades de la agenda política, lo que ha supuesto, el abandono del desarrollo y el avance en la igualdad efectiva de los grupos más vulnerables, entre los que se encuentran las personas con discapacidad.

La Unión General de Trabajadoras y Trabajadores destaca que continúa detectando discriminaciones en el acceso al empleo, falta de accesibilidad, peores condiciones laborales para las trabajadoras y los trabajadores con discapacidad, e incluso rechazo. Por ello, considera necesaria una mesa específica de diálogo social en materia de discapacidad, donde se traten medidas de promoción de la igualdad de trato y oportunidades en la contratación de las personas con discapacidad y se aseguren entornos laborales seguros, accesibles y saludables para las personas con discapacidad.

El sindicato apuesta por la inclusión laboral de las personas con discapacidad en el mercado de trabajo ordinario, garantizando sus derechos sociales y laborales, la igualdad de trato y oportunidades, tanto en el acceso al empleo como en el desarrollo de la relación laboral, y en la previsión y prevención de posibles escenarios de discriminación por motivo de la discapacidad.

En ese sentido, reivindica la necesidad de evaluar, y en su caso rediseñar, las medidas destinadas a facilitar la inclusión laboral de las personas con discapacidad con especial atención a los programas de empleo específicos para mujeres con discapacidad, puesto que son víctimas de una doble discriminación.

Acción sindical integral y transversal en las empresas

UGT destaca la importancia de una acción sindical integral y transversal en las empresas con el objetivo de promocionar y defender los derechos de las personas con discapacidad; garantizar el cumplimiento real y efectivo de la contratación a través de mecanismos como la cuota reserva del 2%; mejorar la calidad del empleo o el mantenimiento del mismo en caso de una discapacidad sobrevenida; y la realización de los ajustes necesarios para una correcta adaptación del puesto de trabajo en función de la discapacidad de que se trate, de forma que las trabajadoras y trabajadores con discapacidad puedan desarrollar su labor sin condicionantes que mermen o dificulten el uso de sus conocimientos y capacidades.