UGT valora las conclusiones elaboradas por la abogada general de la UE, que apunta la prohibición de la inclusión de mujeres embarazadas en la lista de un ERE. La legislación de nuestro país otorga ya protección para las mujeres en situación de embarazo y maternidad, salvo que el empresario pruebe que el motivo de ese despido es distinto a dichas situaciones. Pero ha aumentado este tipo de prácticas con la excusa de la crisis, en una clara situación de discriminación. UGT considera que este pronunciamiento supone un aval al trabajo realizado por el sindicato, que durante los últimos años ha velado por preservar, en las empresas, la igualdad de trato y no discriminación en todos los casos, y reclama un pronunciamiento oficial del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TUE) que, en este sentido, suponga un incremento de la protección para este colectivo.

La crisis financiera y económica sufrida durante los últimos años está afectando al empleo de forma abrumadora. Pero no solo al empleo, sino también a la igualdad entre hombres y mujeres. Durante los últimos años ha aumentado el número de denuncias de mujeres embarazadas o con el disfrute del permiso de maternidad o de reducción de jornada por cuidados de familiares que han sido incluidas en las listas de un ERE de empresa, algo claramente discriminatorio si esa es la causa real de su inclusión en el mismo.

Algunas empresas han aprovechado estos expedientes de regulación para deshacerse de trabajadoras embarazadas y/o con responsabilidades familiares. De este modo, han puesto fin a sus contratos amparados en causas objetivas o económicas, ya que de otra forma les sería imposible por ley.

En este sentido, UGT valora las conclusiones elaboradas por la abogada general de la UE, que apunta a la prohibición de incluir mujeres embarazadas en un ERE, como ha defendido la Unión General de Trabajadores en cada empresa durante los últimos años, analizando las circunstancias concretas de cada expediente para ver si las causas o motivos alegados estaban lo suficientemente justificados para no asistir a una discriminación encubierta. En nuestro país, la legislación otorga ya protección en los ERE para las mujeres en situación de embarazo o maternidad, salvo que el empresario pruebe que el motivo de ese despido es distinto a dichas situaciones.

La actual normativa modificada y mejorada en la Ley de igualdad, frente a las extinciones objetivas por motivos discriminatorios, no opera en los casos de ERE, por lo que se hace necesaria una especial labor de vigilancia y control de las organizaciones sindicales para que no se produzcan estos abusos.

Para UGT, un pronunciamiento oficial, en este sentido, del Tribunal Superior de Justicia de la Unión Europea (TUE), más allá de una mera recomendación de la abogada general de la UE, supondría un espaldarazo a la protección de este colectivo.

Por ello, UGT demanda una mayor protección legal y judicial para las mujeres embarazadas y un continuo esfuerzo de control tanto de la Inspección de Trabajo como de las organizaciones sindicales en las empresas, con el objetivo de evitar más situaciones de discriminación y agravio de las direcciones empresariales que las producidas hasta ahora con la excusa de la crisis.