UGT reclama políticas más eficaces en la promoción y defensa de las personas VIH

Con motivo de la celebración del Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, el sindicato demanda la necesidad de eliminar las desigualdades económicas, sociales y laborales que originan enfermedades como el VIH o el Sida, y exige mejores políticas para defender los derechos de las personas que las sufren y que, en la actualidad, se encuentran en situación de vulnerabilidad y discriminación 


Con motivo del Día Mundial de la Lucha contra el SIDA, que se celebra hoy miércoles, 1 de diciembre, la Unión General de Trabajadoras y Trabajadores reclama la necesidad de eliminar las desigualdades económicas, sociales y laborales que originan enfermedades, como es el VIH y el sida, y otras pandemias. En este sentido, el sindicato exige la adopción de políticas más eficaces en la promoción y la defensa de los derechos de las personas con VIH y Sida que se encuentran en situación de vulnerabilidad y discriminación, promoviendo los derechos de las personas con esta enfermedad, así como la igualdad de trato y oportunidades.

Si bien han sido muchos los avances en la lucha contra las discriminaciones por motivo de esta enfermedad, las personas que viven con el VIH, con frecuencia, siguen enfrentándose al estigma y la discriminación tanto en sus vidas cotidianas como en el ámbito laboral, con dificultades en el acceso al empleo, rechazos en su puesto de trabajo, e incluso despidos. 

El impacto social y económico de la crisis producida por la pandemia ha aumentado su vulnerabilidad social y laboral, suponiendo un obstáculo para alcanzar la meta de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de poner fin a la epidemia de sida para 2030 y “garantizar una vida sana y promover el bienestar para todos en todas las edades”.

Para UGT, el VIH debe ser una prioridad en las agendas políticas, y la Covid-19 no puede significar su freno y su abandono. Además, si algo hemos podido evidenciar con esta pandemia, es lo importante que puede llegar a ser la investigación. Cuesta creer que, desde el descubrimiento de la enfermedad del Sida en 1983, todavía no exista ninguna vacuna contra este virus. Por ello, desde el sindicato, demandamos potenciar la investigación sobre el VIH y que ésta no quede en un segundo plano. 

Urge actuar y adoptar medidas que reduzcan los efectos de esta crisis y ofrezcan respuestas, con el objetivo de eliminar su discriminación y estigma en el ámbito laboral. El estado serológico nunca debería ser motivo de discriminación en el ámbito laboral. Existen instrumentos como la Recomendación nº 200, de la OIT sobre el VIH y el Sida y el mundo del trabajo 2010, que son fundamentales en la lucha contra la discriminación en el empleo y la igualdad de trato de las personas afectadas, pero, aun así, esta enfermedad opera como un factor excluyente social y laboralmente. Es imprescindible, no sólo asegurar el acceso al empleo, sino también el mantenimiento del mismo y que a la vez va a ser un factor generador de protección social.

El VIH no puede ser motivo de discriminación social y laboral

Se debe combatir esa estigmatización desde todos los ámbitos, con políticas transversales, tal y como establece el Pacto Social por la no discriminación y la igualdad de trato asociada al VIH, en el cual participó activamente UGT, a través de acciones dirigidas a su prevención, información y sensibilización acerca de esta enfermedad, para avanzar en la lucha y eliminación de la discriminación en el empleo basado en el estado serológico de una persona. 

Para UGT, el estado serológico, no debería ser un motivo de discriminación que impida la contratación, la permanencia en el empleo o el logro de la igualdad de oportunidades. Por este motivo, nuestra labor sindical se orienta a conseguir, y garantizar, que las empresas y los centros de trabajo sean “espacios de trabajo libres de discriminación por VIH”, velando por el acceso, mantenimiento y desarrollo de su actividad laboral. 

Además, estimamos necesario, que el VIH se incluya en el ámbito de interlocución social, para a través del Diálogo Social, defender los derechos de las personas con esta enfermedad, proteger sus puestos de trabajo, y apoyar su prevención, cuidados y tratamiento. No podemos permitir que las características personales o sociales de los trabajadores sean un impedimento para acceder al empleo y mantenerlo, y sean estigmatizados y discriminados por su estado serológico.


Fuente: UGT