UGT exige promover la gestión sostenible de los recursos naturales

Fecha: 17 Jun 2020

► La desertificación y la sequía son un problema grave que no afecta únicamente al medio natural, pues implica hambre, pobreza, problemas de salud y genera graves desigualdades

► UGT exige al Gobierno medidas encaminadas al consumo y la producción sostenibles e impulsar un pacto consensuado del agua

► El sindicato exige promover el Programa de Acción Nacional sontra la Desertificación

Hoy, 17 de junio, se celebra el Día Mundial de la Lucha contra la Desertificación y la Sequía, con el que la ONU tiene como objetivo el concienciar acerca de las iniciativas internacionales para combatir estos graves fenómenos.

La desertificación es la degradación de la tierra en las zonas áridas, semiáridas y subhúmedas secas por causa de la actividad humana y las variaciones climáticas. Este proceso se debe a la vulnerabilidad de los ecosistemas de zonas secas (que cubren un tercio de la superficie del planeta y buena parte de España), a la sobreexplotación y al uso inadecuado de la tierra. La pobreza, la deforestación, el sobrepastoreo y las malas prácticas de riego son ejemplos de aspectos que afectan negativamente a la productividad del suelo.

La desertificación y la sequía suponen grandes retos para la humanidad ya que afectan al medio ambiente y al medio de vida de millones de personas en su lucha contra la pobreza. Ya en la Cumbre de la Tierra, que se celebró en Río de Janeiro en 1992, la desertificación junto con el cambio climático y la pérdida de la biodiversidad, se catalogaron como los mayores retos a los que se enfrenta el desarrollo sostenible. Pero desde entonces el problema ha seguido empeorando. Hoy en día, más de 2.000 millones de hectáreas de tierras anteriormente productivas se encuentran degradadas, mientras que, en 2030, la producción de alimentos requerirá otros 300 millones de hectáreas de tierra.

Este año, el lema del Día es “Alimentos. Forrajes. Fibra”, con el que se aspira a educar a las personas sobre la manera de reducir su impacto individual y cambiar las actitudes de la sociedad en relación con la producción y el consumo incesantes, las principales causas de la desertificación y la degradación de las tierras.

El suelo se está transformando y degradando a un ritmo insostenible

Los alimentos, los forrajes y las fibras deben competir por el suelo con la expansión de las ciudades y la industria de los combustibles. Por otro lado, el crecimiento demográfico y el incremento de la población urbana intensifican la demanda de tierra para producir alimentos, forrajes y fibras textiles. El resultado final es que la tierra se está transformando y degradando a un ritmo insostenible, lo que daña la producción, los ecosistemas y la biodiversidad. Un declive que se ve empeorado aún más por los efectos del cambio climático.

Con el fin de preservar tierras productivas suficientes para satisfacer la demanda de 10.000 millones de personas en 2050, es necesario modificar nuestro estilo de vida. Mediante cambios en el comportamiento de los consumidores y las empresas y la adopción de una planificación más eficiente del uso de la tierra y de prácticas más sostenibles, podríamos disponer de terreno suficiente para satisfacer la demanda. Todos tenemos una responsabilidad como beneficiarios del suelo. 

Estamos decididos a proteger el planeta contra la desertificación

Desde UGT, consideramos que este Día Mundial brinda una oportunidad única para recordar que se puede neutralizar la degradación de las tierras mediante la búsqueda de soluciones, con una firme participación de la sociedad y cooperación a todos los niveles.  Acciones como la reforestación y la regeneración de especies arbóreas; la mejora de la gestión del agua, incidiendo en el ahorro y la reutilización de las aguas; o el enriquecimiento y fertilización del suelo a través de la regeneración de la cubierta vegetal, son muy efectivas para frenar la degradación de los suelos, a la vez que tienen un alto potencial de creación de empleo.

Por otro lado, consideramos imprescindible reconocer la necesidad de luchar contra la desertificación como parte de nuestros esfuerzos por alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Específicamente, el Objetivo 15 recoge la determinación de gestionar sosteniblemente los bosques, luchar contra la desertificación, detener e invertir la degradación de las tierras y detener la pérdida de biodiversidad.

Desde UGT estamos decididos a proteger el planeta contra la desertificación, ya que consideramos que es un problema grave no solo para el medio ambiente sino también porque genera pobreza y hambre en el mundo.

Por ello, instamos al Gobierno a establecer medidas encaminadas al consumo y la producción sostenibles, así como a promover medidas encaminadas a la gestión sostenible de los recursos naturales. Es necesario, además, disponer de una dotación presupuestaria suficiente para poner en práctica de manera efectiva el Programa de Acción Nacional contra la Desertificación.

Por último, consideramos indispensable abordar desde el consenso un Pacto del Agua con un enfoque social, porque la desertificación y la sequía son un problema grave que no afecta únicamente al medio natural, pues implica hambre, pobreza, problemas de salud y genera graves desigualdades.

Fuente: UGT