​El tercer rescate a Grecia por parte de la UE,  aprobado por el Parlamento, no debe convertirse en un nuevo estrangulamiento de la sociedad griega. En este sentido, UGT pide generosidad y altura de miras por parte de la UE y del Gobierno español y reitera que las políticas de austeridad ponen en claro riesgo la persistencia de una Europa social y democrática, lo que resta sentido a cualquier proyecto de construcción europea.

El sindicato recuerda que aunque el rescate a Grecia evita la catástrofe de su salida del euro, el precio a pagar por el país heleno ha sido extremadamente grande y puede condenar a Grecia a más años de recesión, una muy mala solución para todos los ciudadanos europeos, no solo los griegos.

Por eso, en línea con la Confederación Europea de Sindicatos, UGT pide que el plan de rescate cubra las necesidades de financiación actuales de Grecia y permita la recuperación de su economía.

El Sindicato recuerda que las políticas de austeridad a ultranza que se han puesto en marcha por gran parte de los gobiernos de la UE, como el de nuestro país, obstaculizan la salida justa de la crisis y fomentan un modelo de crecimiento desigual y volátil.

El movimiento sindical europeo aboga por priorizar el empleo, por encima del déficit, por los derechos, frente a la desregulación y por las personas, en lugar del beneficio económico sólo para unos pocos.