Se recorta más de un 20% la inversión en infraestructuras públicas a pesar de la recuperación

Fecha: 21 Abr 2017

​La Unión General de Trabajadores advierte de que, a pesar de la recuperación de la economía, los PGE de 2017 recortan en infraestructuras públicas, concretamente destinan 657 millones de euros menos que en 2016, una reducción de más de un 20% respecto a los presupuestos del año anterior que sitúa la inversión a niveles de hace 22 años. El sindicato considera que estos presupuestos profundizan las debilidades de un modelo productivo que hoy adolece de graves estancamientos y retrocesos. Hoy nuestra economía es más débil y más vulnerable ante shocks externos y vaivenes del ciclo económico internacional, y esto en un contexto de alto desempleo, elevado nivel de endeudamiento, aumenta aún más los riesgos para nuestra economía real. La situación de la inversión en infraestructuras públicas no es coherente con la evolución macroeconómica y mucho menos con las necesidades del país y de su modelo productivo.

El Libro Amarillo de los PGE 2017 en su apartado sobre infraestructuras señala que la inversión pública en infraestructuras es "un instrumento básico para dinamizar la economía, para el aumento de la productividad, el funcionamiento eficaz del mercado de bienes y servicios, la vertebración del territorio, y facilitar el desarrollo de las zonas más desfavorecidas" pero la realidad que esconden los PGE es otra muy distinta a esta idea, ya que cuando la economía crece, los PGE recortan en infraestructuras públicas.

Un recorte es más que evidente ya que los PGE 2017 destinan 657 millones de euros menos a infraestructuras que en 2016, en línea con lo sucedido a lo largo de estos años, si bien el recorte en 2017 es muy superior al de 2016, que fue de 101 millones de euros respecto al año anterior.

De este modo, la partida de infraestructuras sigue menguando respecto al total de los PGE y esta año apenas supone un 1,6% del total, frente al 1.7% de 2016 y el 1,8 del 2017. Esto supone que el gasto destinado a infraestructuras en nuestro país en 2017 es de 5.392 millones de euros (capítulos I a VIII), frente a los 6.049 millones de euros del año pasado.

Si atendemos a la inversión por tipo de infraestructura, se observa como todas las partidas han descendió respecto al año pasado excepto Aeropuertos, que aumenta un 13% (71,2 millones de euros) y Otras infraestructuras, con un 16% de incremento, casi 7 millones de euros.

En cambio, la inversión en carreteras cae un 13% (293 millones de euros), la de ferrocarriles cae un 29% (1.262 millones de euros), la de puertos un 1% (10 millones de euros), las infraestructuras hidráulicas se recortan un 34% (426 millones) y las de costas y medioambientales más de un 15%, (39 millones de euros). En resumen, la inversión en infraestructuras se ha recortado más de un 20% respecto a los PGE del año anterior.

El sindicato considera que el modelo productivo español hoy adolece de graves estancamientos, cuando no retrocesos, en relación con las inversiones en general y en infraestructuras en particular. Y estos PGE no solo no mejoran estos estancamientos, sino que profundizan las debilidades del modelo.

Hoy nuestra economía es más débil y más vulnerable ante shocks externos y vaivenes del ciclo económico internacional. Y esto en un contexto de alto desempleo, elevado nivel de endeudamiento, y debilidad de las inversiones públicas aumenta aún más los riesgos para nuestra economía real ante las incertidumbres internacionales.

Esta situación de las inversión en infraestructuras públicas en España no es coherente con la evolución macroeconómica de los indicadores y mucho menos con las necesidades de país y de su modelo productivo, puesto que sigue ignorando la necesidad de recuperar las inversiones públicas esenciales para acompañar el futuro modelo productivo de nuestro país que en nuestro país no puede esperar más.

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Fuente: UGT