Se debe seguir reforzando la senda de crecimiento salarial impulsada por el V AENC

UGT considera además que el BCE debe mantener el cambio en su política monetaria y continuar la bajada de tipos

El IPC del mes de mayo, publicado hoy por el INE, sitúa la inflación anual en un 3,6%, tres décimas más que en abril y el valor más elevado desde abril del año pasado. De esta manera, por tercer mes consecutivo, la tasa general vuelve a repuntar, esta vez por productos energéticos como la electricidad, que se encarece un 14,5% anual por la normalización del tipo impositivo.

Por su parte, la tasa subyacente, que recoge la inflación de componente más estructural, aumenta una décima respecto al mes anterior, alcanzando una variación anual del 3%. Con ello, se rompe la tendencia de 9 meses consecutivos de descenso interanual, si bien se mantiene en niveles moderados y por debajo de la tasa general.

En cuanto los incrementos anuales más destacados durante este este mes, destacan el aceite de oliva (62,8%), los paquetes turísticos nacionales (17,7%) y las frutas frescas (un 12,1%). En sentido contrario, los equipos de telefonía móvil (-11,3%) los vuelos internacionales (-7,5%) o el gas natural (-6,1%) registran algunos de los descensos de precios más señalados.

La moderación del ritmo de crecimiento de los precios en el conjunto de la Eurozona ha provocado que el BCE, haya bajado los tipos de interés en 25 puntos básicos, hasta el 4,25%. La primera bajada en 8 años. Se trata de una noticia necesaria que tendrá efectos positivos sobre la actividad productiva y la carga hipotecaria de muchas familias trabajadoras, por lo que UGT considera que el cambio de rumbo en materia de política monetaria debe afianzarse hasta la desescalada definitiva de los tipos. 

Garantizar el mantenimiento del poder adquisitivo 

En España, además, los precios pueden moderarse aún más si atendemos a los elevados márgenes sobre beneficios que atesoran las empresas. Así, según los últimos datos publicados por el Observatorio de Márgenes, referentes al primer trimestre del año, estos se sitúan en el 12,5%, 4 décimas más que en 2022 y hasta 3 puntos más que en 2019, antes de la pandemia. 

En consecuencia, también se puede seguir reforzando la senda de crecimiento salarial que ha impulsado el nuevo AENC (2022-2025). En este sentido, los incrementos salariales pactados en los convenios firmados en 2024 ya se sitúan en una media del 4,1%, lo que está permitiendo mejorar el poder adquisitivo de la población trabajadora.

 


Fuente: UGT