“Queremos 350 síes en el Congreso al acuerdo de reforma laboral”

Mariano Hoya manifiesta que UGT propondrá una subida salarial del 5% en 2022, para que los trabajadores y trabajadoras no pierdan poder adquisitivo, como ocurrió en 2021


El Vicesecretario General de UGT, Mariano Hoya, ha manifestado antes de participar en la asamblea informativa sobre la reforma laboral que se celebra en la sede de UGT, que el acuerdo de reforma laboral “tiene connotaciones históricas” porque “es la primera vez que una reforma laboral no va a recortar derechos y es fruto del acuerdo y el diálogo social, con la incorporación de CEOE, CEPYME, UGT y CCOO”. Es un acuerdo que “nos permite alcanzar casi todos los objetivos que nos marcamos al inicio de la negociación”. Equilibra la negociación colectiva, recupera la ultraactividad y la prevalencia del convenio sectorial. Se consigue una reducción muy importante de la temporalidad en nuestro país, que UGT cifra en 10-12 puntos. “Pretendemos que España sea un país de empleo fijo y estable, que las empresas multiservicios, que tanto han precarizado el mercado de trabajo, sean el pasado” y eliminar las dificultades de los jóvenes para acceder al mercado laboral a través de los contratos formativos. Asimismo, se ha conseguido implantar los ERTE frente a los despidos, lo que equilibrará la reducción de plantillas. Por tanto,” la valoración que hace UGT es muy positiva”.

Hoya ha señalado que, en el encuentro de hoy, que forma parte de una campaña explicativa para informar a los afiliados y afiliadas sobre los contenidos de la reforma laboral, se pretende poner en común la estrategia a seguir en relación con la negociación colectiva de 2022. En este sentido, ha recordado que 2021 ha sido un año de pérdida de poder de compra, pues el IPC se situó en el 6,5% y la media de subida salarial de los convenios ha sido del 1.47%.  

Ha recordado que hay muchos sectores y empresas importantes que tienen que renovar convenios y que “no se debe firmar ningún convenio en 2022 que no contemple la cláusula de revisión salarial”. Además, “tal y como ha terminado este año el IPC, a juicio de UGT, y a falta de concretar una cifra con CCOO, los salarios deberían subir un 5% este año. “Los trabajadores y trabajadoras de nuestro país no pueden seguir perdiendo poder adquisitivo”- ha dicho. 

Asimismo, ha demandado al Gobierno que cumpla su compromiso de subida del SMI para que alcance los 1.000 euros al mes en 2022, y  se cobre con carácter retroactivo desde el 1 de enero. El objetivo es que al final de la legislatura se sitúe en el 60% del salario medio. .

Apoyos a la reforma laboral

Respecto al apoyo de la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, al acuerdo de reforma laboral, ha declarado que le parece perfecto, pero “no queremos que sea solo Arrimadas, sino que haya 350 síes, porque es una reforma fruto del diálogo social”. En este sentido, ha pedido también a ERC que la apoye.

Ha recordado que el artículo 7 de la Constitución legitima a los agentes sociales al mismo nivel que lo hace al artículo 6 con los diputados y ha pedido a los partidos políticos que respeten el diálogo social y homologuen la reforma laboral “sin mover ni una coma”. Otra cosa es que a partir del día 4 el Congreso de los Diputados siga trabajando, porque nosotros no estamos convencidos de que la reforma sea 100 por 100 perfecta, hay temas que no se han tocado, como los despidos, pero es que “en esta negociación solo había una serie de ítems comprometidos con Europa que eran los que tenían que salir adelante y han salido fruto del acuerdo”.

Respecto a la subida de las pensiones que se aprueba hoy, ha dicho que es fruto del acuerdo alcanzado en el marco del diálogo social. Un acuerdo que ha supuesto la derogación completa de la reforma de pensiones del PP. “Gracias a este acuerdo los pensionistas de este país van a cobrar 10 veces más de lo que hubieran cobrado si hubiera seguido la reforma del PP”.

En la jornada sobre la reforma laboral ha participado también el Secretario General de UGT, Pepe Álvarez, y el Secretario Confederal, Fernando Luján.

 


Fuente: UGT