Por una industria fuerte, moderna y respetuosa con los derechos de los trabajadores
Fecha: 04 Nov 2016
La Secretaria Confederal de UGT, Isabel Araque, ha defendido la necesidad de cambiar el modelo productivo en España, en base a un Plan Estratégico para la Industria. Un plan en el que se conjugue la "innovación, robotización y digitalización, que a día de hoy es inherente a la producción, con la preservación y protección de los derechos de los trabajadores y trabajadoras".
Araque, que ha hecho estas declaraciones durante su intervención en las I Jornadas Comarcales de Industria y Desarrollo Sostenible en el Campo de Gibraltar, organizadas por UGT- Cádiz, ha destacado la apuesta decidida del sindicato para contribuir a la reindustrialización de nuestro país, lo que permitirá construir una economía más fuerte.
Araque ha afirmado que "el nuevo modelo productivo debería sustentarse en actividades que den solidez al crecimiento, estabilidad al volumen y calidad del empleo y aporten valor añadido e innovación".
Ha señalado que la industria debe aumentar su peso en la composición del PIB y que es preciso apoyar el desarrollo de la investigación y la innovación en todos los sectores, lo que exige un mayor esfuerzo público y privado. Asimismo, ha demandado un Pacto de Estado por la Energía, avanzar hacia una economía baja en emisiones de carbono y establecer un sistema de formación para el empleo, que dote a los trabajadores de competencias profesionales acordes a las nuevas demandas del mercado de trabajo.
Los retos y los riesgos de la Industria 4.0
La Secretaria Confederal de UGT ha reflexionado también sobre los retos y posibles riesgos para el empleo de la Industria 4.0, porque "la digitalización y la robotización han venido para quedarse". En este sentido ha afirmado que cambiarán las necesidades laborales, en volumen y en especialización y que UGT debe centrar su acción en esta realidad: en la empleabilidad futura de la fuerza de trabajo.
"Es fundamental- ha dicho- acompañar la puesta en marcha de la Industria 4.0 con planes de formación dirigidos a las plantillas afectadas", en los que participen los representantes de los trabajadores. "Formación en el puesto de trabajo, actuando a través de la negociación colectiva, pero también en la educación reglada y a través de las políticas activas".