No se puede aprovechar la revolución tecnológica para desregular relaciones laborales
Fecha: 13 Mar 2018
La Secretaria Confederal de UGT, Isabel Araque, ha intervenido en la Jornada Conferencia Tripartita sobre “El futuro del trabajo que queremos en Castilla y León” donde se ha centrado en analizar “La organización del trabajo y la producción”.
Isabel Araque ha subrayado que “la globalización, la evolución de la informática y la robotización, así como el desarrollo de las TIC, la inteligencia artificial, la biotecnología o la nanotecnología están modificando todos los ámbitos de nuestra vida, están cambiando las relaciones económicas y laborales y están transformando la organización de la producción empresarial”.
“Una innovación tecnológica” ha explicado, “que tiene consecuencias positivas –como el aumento de la competitividad empresarial y de la productividad- pero también riesgos y problemas para las relaciones laborales -como la destrucción de empleo o el aumento excesivo de la flexibilidad de los trabajadores”.
Araque ha manifestado que “esta revolución tecnológica está contribuyendo a que las empresas apuesten por formas de organización empresarial y del trabajo como la contratación temporal y a tiempo parcial, la externalización y subcontratación del trabajo, la subcontratación de funciones y tareas a través de plataformas digitales, el trabajo móvil o conectado, 24 horas al día 7 días a la semana o la economía de plataformas digitales (como Airbnb, Uber, Glovo, Deliveroo, Stuart, etc.), que suponen un evidente aumento de la inestabilidad en el empleo y de la inseguridad económica y un empeoramiento de las condiciones de trabajo”.
La Secretaria Confederal de UGT ha señalado que “el sindicato no se opone al avance de la digitalización ni a la transformación tecnológica de las empresas, pero sí se resiste a permitir que esta revolución tecnológica sea utilizada por algunos Gobiernos y algunos empresarios para desregular las relaciones laborales, eliminar empleos de calidad, degradar –aún más- los derechos de los trabajadores y aumentar la desigualdad y la pobreza laboral”.
“Por ello, UGT considera que hay que hacer un gran esfuerzo para convertir a la negociación colectiva en una herramienta eficaz para la regulación equilibrada de los procesos de digitalización y transformación tecnológica en las empresas pero también es necesario que los sindicatos tengan un papel relevante en este proceso de cambio que permita situar el trabajo digno, los derechos sociales y laborales, la libertad sindical, la solidaridad y la justicia social en el centro de la sociedad del futuro y en el eje de la acción política de los gobiernos nacionales y de las instituciones internacionales” ha finalizado.