​Los Secretarios Generales de UGT y CCOO, Pepe Álvarez e Ignacio Fernández Toxo se han reunido esta mañana con el Secretario General del PSOE, Pedro Sánchez para analizar la situación política, económica y social actual.

Álvarez ha manifestado que, en la reunión, han trasladado la idea de que “los españoles no pueden esperar más con un Gobierno en funciones que tiene atascados todos los programas de políticas sociales” y han hecho un llamamiento a que las fuerzas políticas del cambio busquen, en los próximos días, “puntos de acuerdo y de equilibrio y piensen más en los ciudadanos y menos en las próximas elecciones”.

“Es imprescindible tener un proyecto político para los próximos años que realmente permita abordar los problemas de este país. Problemas como la lucha contra la corrupción, la lucha por la creación de empleo, tanto a corto plazo con un plan de choque para el empleo, como a medio y largo plazo, con políticas de fondo que sitúen a nuestro país en la senda de la recuperación del empleo de calidad, o las negociaciones con la Comisión Europea para abrir nuevos márgenes en relación con el déficit presupuestario para poder generar esas políticas”.

Pero, ha señalado también que “no se trata de hacerlo a cualquier precio sino de hacerlo de acuerdo con lo que nosotros pensamos que es la opinión de una mayoría amplísima de nuestro país que quiere cambio, quiere progreso y un programa que responsa a la pluralidad que en estos momentos hay en el Congreso de los Diputados y quiere, sobre todo, muchas soluciones a los problemas de los ciudadanos”.

En este sentido, ha subrayado, que a los sindicatos “nos interesan mucho más las políticas que los políticos porque tiene mucho más sentido que hablemos más de para qué, que de con quién, y, en ese sentido, las organizaciones sindicales van a continuar trabajando porque, aunque hoy parezca imposible, sea posible un Gobierno que aborde los problemas que tiene el país”.

Durante el encuentro, tanto Pepe Álvarez como Ignacio Fernández Toxo han propuesto a Pedro Sánchez que un planteamiento posible sería configurar una base parlamentaria sólida, para un periodo que puede ser la legislatura o una parte de la legislatura -con algún punto intermedio, previa garantía de que se van a aprobar presupuestos generales y demás-  tras la cual pudiera haber una moción de confianza en mitad de la legislatura para evaluar la situación en ese momento.