Las plataformas digitales hacen cambios para eludir a la Inspección de Trabajo
Fecha: 02 Mar 2018
Las plataformas digitales que emplean a falsos autónomos, los llamados "riders", están introduciendo cambios en su gestión con el objetivo de eludir las sanciones de la Inspección de Trabajo y mejorar su imagen pública. Los cambios afectan a las aplicaciones informáticas, la oferta de seguros de accidentes a los "riders", o la colaboración con ONG en campañas presuntamente solidarias. Algunas de estas iniciativas están empeorando aún más las condiciones de explotación laboral de estos trabajadores.
A través de la plataforma Turespuestassindical.es de UGT, los repartidores están denunciando cambios en las diferentes plataformas para seguir encubriendo un posible fraude en su relación laboral y aparentar mayor independencia de sus mal llamados "partners". Deliveroo tiene recurridas dos actas de liquidación de la Inspección de Trabajo de Madrid y de Valencia que la obligan a dar de alta a sus "riders" en el Régimen General de la Seguridad Social, y están pendientes de resolver las denuncias presentadas a las plataformas digitales de UberEATS, Glovo y Stuart.
Los cambios en las aplicaciones no buscan mejorarlas sino evitar que a través de ellas se pueda obtener información que comprometa a las plataformas ante la Inspección de Trabajo o los juzgados de lo social. En este sentido, Deliveroo ha hecho desaparecer la aplicación STAFFOMATIC que utilizaba para asignar los horarios, pasando a realizarla en función de una valoración personal de cada trabajador o trabajadora a la que estos no tienen acceso y que ha generado una competencia salvaje para la obtención de los mejores horarios. A través de STAFFOMATIC la Inspección de Trabajo ha podido demostrar que los repartidores no eran libres para elegir su horario de trabajo, como insisten estas plataformas.
Acceso a Seguros y subastas de ropa
Tanto Deliveroo como Glovo ofrecen a sus trabajadores y trabajadoras la posibilidad de acceder a seguros de accidentes para cubrir la actividad del reparto. Glovo paga en días lluviosos un 30% más, fomentado así el riesgo de accidentes. Recordemos que los repartidores, al ser autónomos, tienen que asumir el coste de los accidentes de trabajo.
Para mejorar su imagen, han comenzado a trabajar con ONG, como Nuevo Futuro, subastando prendas de Deliveroo customizadas por Agatha Ruiz De La Prada con fines sociales. Sin embargo, las plataformas cobran a los repartidores entre 70 y 90 euros por los uniformes y el material que les facilitan, y que se descuentan de la primera facturación realizada por el repartidor.
Glovo cobra ahora 4,30 euros al mes a los trabajadores por el servicio de un "Seguro en caso de Accidente o de Responsabilidad Civil". Si lo comparamos con el seguro establecido en el convenio colectivo de reparto de Logística, Paquetería y actividades anexa, la diferencia es abismal porque, en este último caso, las empresas de esta actividad -en caso de accidente o invalidez- tiene que cubrir todo el salario anual además de doblar la cantidad que ofrece Glovo, que es de 20.000 por invalidez. Les cobra también por la aplicación que utilizan para poder trabajar, y que la Inspección de Trabajo ha considerado como el principal elemento de laboralidad, porque sin ella no hay trabajo. UberEATS cobra a los repartidores el 10% de la facturación por utilizar su aplicación.
UGT denuncia la gran capacidad de transformación de estas plataformas digitales, que en este caso están introduciendo cambios para seguir negando relación laboral con sus repartidores, a pesar de que estos trabajadores no pueden negociar sus condiciones, es un trabajo jerarquizado, dependiente de una organización que establece los salarios, horarios, sanciones, despidos, etc.