​El Secretario de Acción Sindical de UGT, Toni Ferrer, ha afirmado que la Responsabilidad Social de las Empresas (RSE) “no debe ser márketing y comunicación, sino una forma de gobernar la empresa con la participación de los trabajadores”. 

Toni Ferrer ha realizado estas declaraciones en la jornada sobre RSE organizada por UGT-Castilla y León, donde ha señalado que el origen de la RSE está en la “exigencia de la rendición de cuentas a las empresas, para que éstas no solo tengan como objetivo generar valor de riqueza para sus consejeros sino mejorar el empleo, la cohesión social y la participación en el seno de la empresa”. 

En este sentido, “a pesar de que en Europa se ha ido configurando la RSE de manera potente, en España hemos vivido al margen y el retraso que llevamos lo estamos pagando aún. De hecho, el pasado viernes se aprobó en Consejo de Ministros la Estrategia Española de RSE cuando en Europa ya se está discutiendo una nueva”.

La Unión General de Trabajadores “ha votado a favor de esa estrategia pero con una posición crítica, porque en su concepción se nota que en España no se ha asumido aún qué es la RSE, ya que se entiende más como un elemento de comunicación y marketing en lugar de una herramienta de gestión empresarial. Esto es importante porque las empresas pretenden ser socialmente responsables en la matriz pero luego hacen las mayores tropelías en sus filiales. Por ello, el movimiento sindical internacional tiene que invertir esfuerzos en poner coto y frenar estas situaciones”. 

Para el sindicato, la RSE “es un instrumento esencial para poder exigir responsabilidad a la empresa y de participación en la misma. Para ello, se requieren los instrumentos necesarios que den cobertura a nuestros representantes en la empresa”. En ese sentido, en el año 2005 “creamos el Observatorio de RSE, en el que hacemos 3 estudios cada año”.

“Uno sobre políticas, práctica y cultura empresarial, junto con la Universidad de Valencia, sobre la información que nos remiten las empresas del Ibex-35. Otro sobre nuestras impresiones de esas empresas, sobre nuestras secciones sindicales en esas empresas. Y un tercer estudio sobre las pequeñas y medianas empresas”.

Con todo ello, “sacamos conclusiones suficientes que nos permiten ir convirtiendo la RSE en una herramienta de intervención sindical y no solo de marketing y comunicación. Y es que la RSE se está convirtiendo en un instrumento en el que los trabajadores no estamos ajenos”.