Los datos de paro registrado y afiliación a la Seguridad Social de agosto, publicados este martes, muestran un aumento de las personas registradas como paradas y un descenso de las afiliadas con respecto a julio; una tendencia que es habitual en los meses de agosto, al coincidir con el periodo estival y el cierre por vacaciones de muchas empresas.  

Así, el paro registrado se incrementa este mes en 21.884 personas, el menor aumento para un agosto desde 2016, hasta un total de 2.572.121; por lo que, a pesar del aumento, sigue siendo el dato más bajo para un mes de agosto desde 2008. Con respecto a la afiliación, se reduce este mes en 193.704 personas, registrando un total de 21.189.402 personas afiliadas. De esta forma, la afiliación continúa manteniéndose, por quinto mes consecutivo, por encima de los 21,1 millones de afiliados. Con respecto al año pasado, hay 130.579 personas menos en paro y 482.902 personas más afiliadas a la Seguridad Social, lo que supone un ritmo de creación de empleo del 2,33%. 

Sin embargo, en términos desestacionalizados, el paro registrado baja en 7.724 personas y la afiliación crece por 52 meses consecutivos, esta vez en 30.189 personas, hasta un total de 21.198.679 personas afiliadas.

Por otro lado, la temporalidad de la afiliación se reduce muy ligeramente, en tres centésimas, hasta el 14,2%, tras dos meses registrando aumentos. Un valor muy inferior al existente en el mismo mes de 2021, antes de la reforma laboral, cuando era del 29,3%, más del doble de la actual. 

Con respecto a la contratación, este mes se han registrado un total de 1.040.159 contratos, de los que 389.735 son indefinidos. Esto supone el 37,5% de la contratación, 29 puntos más que los registrados en el mismo mes de 2021. Actualmente, hay 14,38 millones de personas afiliadas con un contrato indefinido, 3,36 millones más que en diciembre de 2021. Por su parte, la modalidad más estable, la indefinida a tiempo completo, registra 163.674 contratos, aumentando 3 décimas su peso en la estructura de contratos, hasta el 15,7% del total, el triple de la que existía antes de la reforma (5,3%). 

Por tanto, no hay duda de que la reforma laboral ha marcado un antes y un después en términos de calidad de empleo, manteniendo la temporalidad de forma estructural en niveles mucho más bajos que los existentes antes. A su vez, el peso de la contratación indefinida y, sobre todo, aquella a tiempo completo, continúan en valores superiores tras más de dos años y medio de aplicación de la reforma. Unos datos que, al fin y al cabo, reflejan la estabilización del mercado laboral en torno al trabajo estable y de calidad. 

Avanzar en el camino de la estabilidad con la reforma del despido

Por ello, es el momento de continuar avanzando en el camino de la estabilidad iniciado gracias a la reforma, modificando las cuestiones que quedaron pendientes, como los costes y las causas del despido. Pues, como ha concluido el Comité Europeo de Derechos Sociales tras la reclamación presentada por UGT, España no cumple con la Carta Social Europeo en materia de despido improcedente, no garantizando el derecho de los trabajadores a una protección adecuada. 

Así, el sindicato reclama al Gobierno que convoque con urgencia al Diálogo Social para adaptar la legislación española a la normativa europea, fijando una indemnización por despido plenamente resarcitoria del daño causado y recuperando también, entre otras cuestiones, los salarios de tramitación, de forma que despedir no salga tan rentable para el empleador. 

Para UGT, el despido debería ser la última de las opciones posibles, priorizando otras vías como la formación y recolocación de las personas trabajadoras dentro de la empresa; una estrategia que, además de ser más eficiente para la organización, proporciona a las personas trabajadoras un extra de seguridad y estabilidad en sus puestos de trabajo. 

Además, el secretario general de UGT, Pepe Álvarez, ha valorado los datos en una entrevista en RNE. Para Álvarez, "España continúa teniendo un problema con el empleo. Continuamos teniendo una tasa de desempleo alta”, ha señalado. Por este motivo, considera que “hay que actuar sobre la calidad del empleo”: “No nos podemos conformar con el empleo estacional, hay que ir hacia un empleo que genere estabilidad y buenas condiciones de trabajo”.

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