La propuesta de Presupuesto de la UE para 2021-2027 es desequilibrada
Fecha: 04 May 2018
La Comisión Europea ha difundido su propuesta de Presupuesto plurianual de la Unión Europea para el periodo 2021-2027, el primero tras la salida de Reino Unido, que deja un agujero de hasta 15.000 millones de euros en las cuentas comunitarias.
Para la Unión General de Trabajadores, el proyecto de presupuesto que plantea la Comisión Europea es injusto y desequilibrado, ya que prioriza el gasto en seguridad y defensa frente a la reducción de las ayudas a la política agrícola, al desarrollo rural, y a los fondos de cohesión, incluido el Fondo Social Europeo.
No se corresponde con las prioridades políticas que continuamente defiende la Unión Europea, temas tan importantes como la despoblación de las zonas rurales, o el Pilar Europeo de Derechos Sociales, entre otros, no tienen prevista una línea presupuestaria que permita alcanzar sus objetivos.
El presupuesto de Barroso para 2014-2020 era de 959.900 millones de euros, mientras que el que ahora propone Juncker supone 1,28 billones de euros. La Comisión plantea un recorte de alrededor del 5% a las subvenciones de la política agrícola común (PAC) y una rebaja del 4% a los pagos directos. Estas dos partidas, que acaparan en la actualidad el 70% del presupuesto de la UE, pasarían al 60% con esta propuesta.
Además, la Comisión propone un aumento de otras partidas de gasto que considera prioritarias, como son la inmigración; la I+D+i (aumenta un 50%); Erasmus se duplica (pasa de 15.000 millones de euros a 30.000 millones); Seguridad y defensa se multiplica también por dos; la partida destinada a la acción exterior de la UE crece un 26%; y el gasto en control de fronteras se triplica.
UGT comparte con la Confederación Europea de Sindicatos (CES) –de la que la Unión General de Trabajadores es miembro- sus propuestas para: aumentar el presupuesto de la UE al 1,3% de la RNB; incrementar los recursos propios hasta al menos el 50% del presupuesto; que se asigne al menos el 30% de los fondos de cohesión al FSE; y que el Fondo Europeo de Transición se anticipe a los cambios apoyando iniciativas como los programas de formación y orientación profesional.
La política de cohesión, es el principal instrumento de inversión de la Unión Europea, al invertir en nuestras regiones y ciudades, tenemos más posibilidades de paliar las desigualdades entre regiones y avanzar más rápidamente hacia la integración social. Esta política es la llave de la solidaridad europea y merece un ambicioso presupuesto para después de 2020, fuerte, solidario, flexible, moderno, simplificado, justo, social, transparente, redistributivo, eficaz, eficiente y equilibrado, para conseguir políticas europeas sólidas.