La legislatura que termina ha sido muy dura con los derechos laborales y sociales
Fecha: 26 Oct 2015
El Secretario General de UGT, Cándido Méndez, ha afirmado que la legislatura que termina “ha sido muy dura en términos de destrucción de derechos laborales y de asestarle un golpe muy duro a nuestro sistema público de pensiones, una contrarreforma del sistema de pensiones que provoca la eliminación de las posibilidades de mantener el poder adquisitivo de los pensionistas, y esto habría que corregirlo”.
Cándido Méndez ha realizado estas declaraciones tras el acto de apertura de la jornada sobre Empleo, Discapacidad y Negociación Colectiva organizada por la Fundación Francisco Largo Caballero y la Fundación ONCE, donde ha señalado que “se ha impuesto, además, un recorte estructural de diez mil millones de euros en Sanidad y Educación”.
“Los cuatro ejercicios presupuestarios han sido muy duros, con muchos recortes que han afectado a los derechos y la calidad de vida de nuestro país y han provocado que España sea el país de Europa donde más ha subido la desigualdad y la pobreza, que está en el 29,2% de la población”.
En este sentido, ha considerado que “el Gobierno ha pretendido enmascarar, con el último presupuesto, los destrozos de los cuatro anteriores. Pero este quinto es una tirita que no puede contener la hemorragia de recortes de derechos o de debilitamiento de los servicios públicos fundamentales”.
“Si el Gobierno quería utilizar este presupuesto con afán electoral o para tranquilizar a los estamentos superiores no lo ha conseguido, porque ya lo ha descalificado la Comisión Europea y ha quedado reducido a papel mojado”.
El PSOE debe hablar con claridad de su propuesta de reforma laboral
En relación a la propuesta de reforma laboral del PSOE, Cándido Méndez ha señalado que “lo primero que debería hacer es hablar con claridad de este tema, porque ha generado una gran confusión. En este país, todos los partidos deberían ubicar en sus justos términos lo que han significado las reformas laborales, analizando sus consecuencias”.
“Las reformas laborales impuestas han sido dañinas y no han resuelto ningún problema de la economía. La última reforma, la de 2012, exige de su derogación para restituir los equilibrios rotos, para eliminar que la única variable de ajuste sea el despido y para evitar la descomunal judicialización en las relaciones laborales”.
“Hay razones más que sobradas para esta derogación. Y será a partir de la restitución de los equilibrios vulnerados cuando se abra, si hay que abrir, un proceso de negociación para el nuevo Estatuto de los Trabajadores”.
Por ello, “el PSOE debe hablar con claridad, por la razón, además, de que los votantes ya no aceptan más propuestas confusas que les lleven a sorpresas desagradables después de las elecciones”.