La Cumbre Europea de Gotemburgo debe aprovechar la oportunidad para hacer realidad la Europa Social
Fecha: 16 Nov 2017
UGT que participa en la Cumbre Social de la UE en Gotemburgo y en las reuniones preparatorias de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), celebra que, tras años de reivindicación del movimiento sindical, por fin, la Comisión Europea tenga en cuenta a las personas y ponga en marcha el tan necesario Pilar Europeo de Derechos Sociales.
Aunque los derechos contenidos en el Pilar Social no son de aplicación directa, ni vinculantes para los Estados miembros, esta iniciativa de la Comisión Europea, representa una oportunidad para consolidar, de manera real, estos derechos, porque sin Europa social habrá desafección ciudadana y puede peligrar la propia UE.
UGT, que está participando activamente en la campaña de la CES, considera que para que el Pilar Social Europeo sea eficaz debe cumplir con una serie de premisas.
Debe ser un acuerdo que se aplique de manera rápida y urgente, para recuperar cuanto antes el modelo social europeo, los salarios y los derechos arrebatados por la crisis y las políticas de austeridad.
Debe fijarse un plan de acción para cumplir los derechos. Esto requiere la necesidad de un desarrollo normativo en materia de empleo y protección social. Establecer los mismos derechos en toda Europa y en todos los lugares de trabajo.
Es necesario establecer un compromiso de inversiones por parte de la UE y los gobiernos nacionales para hacer realidad los derechos contenidos en el Pilar Social.
Hay que impulsar una legislación europea que haga cumplir estos derechos, fijar normas comunes y únicas en la UE, en materia laboral y social.
Es necesario el apoyo activo de todos los organismos de la UE. Es decir, el Pilar Europeo de Derechos Sociales, no solo debe contemplarse desde la perspectiva legislativa, sino también desde el marco de la gobernanza económica y, a través del Semestre europeo, incorporando la dimensión social al mismo nivel que la económica.
Asimismo, es preciso equilibrar el peso de las recomendaciones sociales y económicas anuales; reafirmar los fundamentos sociales de la UE, afrontando los desafíos derivados de los cambios económicos, tecnológicos y sociales; establecer más y mejor diálogo social (desbloqueando el diálogo social dónde ha desaparecido y desbloqueando los acuerdos estancados) y reforzar la negociación colectiva y los sindicatos , un paso imprescindible para avanzar en el reparto de la riqueza y atajar las desigualdades.
Por último, hay que regular la digitalización de la economía, para evitar la explotación laboral y las prácticas abusivas con los trabajadores. La digitalización debe contribuir a mejorar las condiciones laborales y el sostenimiento del Estado de Bienestar, no solo a incrementar los beneficios de los trabajadores.