La CSI reclama la creación de 62 millones de empleos para encarar el crecimiento de las economías mundiales
Fecha: 14 Nov 2014
Con motivo de esta nueva cumbre mundial del G-20, que se celebra los próximos 15 y 16 de noviembre en Brisbane (Australia), el movimiento sindical internacional, del que UGT forma parte, integrado en la Confederación Sindical Internacional (CSI) dentro del Grupo Laboral 20 (L-20), ha venido reiterando una serie de propuestas tendentes a lograr un compromiso de crecimiento mundial que requiere la inmediata creación de 62 millones de puestos de trabajo en el mercado laboral mundial.
Desde que estalló la crisis financiera en 2008, el L-20 ha reivindicado un diálogo inclusivo en los procesos intergubernamentales del G-20, con el objetivo de asegurar el empleo y el crecimiento, en consonancia con el grupo empresarial Bussines-20 (B-20), el de la sociedad civil (C-20) y el de la Juventud (Y-20).
Un informe elaborado este año por el grupo de los trabajadores concluye que las políticas del G-20 han sido calificadas de ineficaces por el 56% de los encuestados para mejorar las condiciones de los trabajadores que tienen empleo. Un resultado que, sumado a que en el año 2013 más de 200 millones de trabajadores se encontraban sin empleo (un 5% más que en el año 2012), da la razón a que las políticas del G-20 han sido, por un lado, erráticas y, por otro, solo se han centrado en la protección del sistema financiero y la salvaguarda de los intereses de las multinacionales.
Durante la cumbre, los ministros de Empleo han incluido en la agenda temas como el desempleo y el crecimiento, pero han sido incapaces de conseguir un consenso en relación al aumento de los salarios, que se han visto reducidos en estos años de crisis a nivel mundial.
La propia Organización Internacional del Trabajo (OIT) subraya que en estos seis años de crisis los mercados laborales siguen enfrentando graves problemas en términos de cantidad y calidad del empleo, de forma que ya no queda margen para la pasividad en la que se ha movido el G-20 y sus gobiernos respecto a la creación de empleo de calidad.
Por todo ello, una vez más, el movimiento sindical internacional reivindica, a través del L-20, entre otros aspectos:
- La generación de inversiones para crear empleo de calidad
- Asegurar una distribución equitativa de los ingresos
- Una regulación del sector financiero
- Desarrollar políticas de formación de los trabajadores
- Garantizar la formalización del trabajo con salarios mínimos y respeto de los derechos laborales con viviendas de protección social
- Dar seguimiento a la aplicación real de los compromisos del G-20