​Los gobiernos nacionales de la UE tienen el deber de enfrentarse conjuntamente y de manera responsable a la crisis humanitaria en el Mediterráneo - no sólo hacia las personas que se ahogan en el mar, sino también por los muchos miles de hombres, mujeres, y niños desesperados que arriesgan su vida huyendo de la pobreza y de los conflictos en África y Medio Oriente para refugiarse en la UE - dijo la Confederación Europea de Sindicatos (CES)​.

"La UE se enfrenta a una crisis humanitaria sin precedentes", dijo Bernadette Ségol, Secretaria General de la CES. "La respuesta de la UE debe ser firme y humanitaria".

La CES se felicita por el liderazgo mostrado por la Comisión Europea para proponer una solución europea y apoya ampliamente sus propuestas.

"Ahora corresponde a los gobiernos nacionales demostrar que son capaces de actuar juntos de manera efectiva. Hago un llamamiento a los gobiernos para que no olviden su responsabilidad, y no pretendan dejar la gestión de la crisis únicamente en manos de los países cuyas costas están más cerca de los refugiados".

La CES pide a los Ministros de Justicia y de Asuntos Interiores de la UE que se reunirán los días 15 y 16 de junio, y a los líderes de la UE en la Cumbre del 25 y 26 de junio, que:

• Autoricen la continuidad de las operaciones conjuntas de Frontex, cuyo nivel es ahora comparable al de la precedente operación italiana 'Mare Nostrum', que se mantengan durante todo el tiempo que la ola migratoria perdure, y que tripliquen el presupuesto de Frontex como propone la Comisión Europea;
  
  
• Acuerden el plan de reubicación de al menos 40.000 migrantes (principalmente en Italia y Grecia) según propone la Comisión Europea, pero sin limitarla a los sirios y eritreos;
  
  
• Apoyen un plan de reasentamiento de la UE para los migrantes en campamentos fuera de la UE, por ejemplo en Libia y Turquía, que incluya a más de las 20.000 personas propuestas por la Comisión Europea;
  
  
• Se pongan de acuerdo sobre la necesidad de revisar tanto el mandato de Frontex (para llevar a cabo la búsqueda y el rescate) y como el Reglamento de Dublín sobre el reasentamiento de refugiados.
  

La CES hace hincapié en que una forma clave para asegurar que los inmigrantes sean bien recibidos en las ciudades europeas es garantizar que reciban el mismo salario y condiciones de trabajo que los trabajadores locales, y que los empleadores no les exploten con el fin de bajar los salarios.

"No puedo dejar de insistir lo suficiente sobre el hecho que los sindicatos y la aplicación de los convenios colectivos puedan ayudar a integrar con éxito a los inmigrantes en la sociedad", dijo Ségol, "garantizando que la condiciones salariales y de trato sean las mismas para todos.”

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