La CES denuncia las prácticas antisociales y contra la negociación colectiva de algunas líneas aéreas de bajo coste
Fecha: 17 Mar 2015
La Confederación Europea de Sindicatos (CES), en la reunión del Comité Ejecutivo, celebrado el 10 y 11 de marzo, ha ratificado una declaración en la que denuncia que algunas líneas aéreas de bajo coste amenazan la negociación colectiva, ignorando el derecho fundamental de los trabajadores a negociar y a acordar condiciones de trabajo y salarios con su empleador.
La CES denuncia las prácticas antisociales de algunas de estas compañías, entre ellas Ryanair y la transportista aérea de bajo coste Norwegian, y advierte que si tienen éxito en sus intenciones de socavar las condiciones de trabajo y los convenios colectivos en Europa, cambiarán las perspectivas para todos los trabajadores en Europa.
Por eso, reclama la necesidad urgente de mejorar y adaptar la reglamentación del sector aéreo europeo, algo que debe hacerse en colaboración con los interlocutores sociales, y establecer una serie de reglas comunes en Europa para garantizar buenas condiciones de trabajo , porque ¡Hay que poner fin a esta carrera a la baja!
Declaración de la CES
Algunas líneas aéreas de bajo coste amenazan la negociación colectiva
Adoptada por el Comité Ejecutivo en su reunión de 10-11 de marzo de 2015
Al mismo tiempo que el Comité Ejecutivo de la CES iniciaba su reunión de los días 10 y 11 de marzo de 2015, los pilotos de la transportista aérea de bajo coste Norwegian empezaban su 11° día de huelga.
La exigencia principal del Sindicato Noruego de Pilotos (NPU) era la firma de un convenio colectivo con su verdadero empleador, Norwegian Air Shuttle.
En Dinamarca, Ryanair ha establecido una sede en Copenhague pero rechaza la petición de los sindicatos daneses de un convenio colectivo.
Tras varios días de negociación, el conflicto en Noruega finalizó en la tarde del 10 de marzo, con un resultado satisfactorio para ambas partes.
La Federación Europea de Trabajadores del Transporte (ETF) y sus afiliadas Parat (en Noruega) y FPU (en Dinamarca) están luchando con determinación contra las prácticas antisociales de las compañías aéreas de bajo coste. Juntas, reclaman el reconocimiento de los sindicatos y su capacidad para negociar convenios colectivos, incluso a nivel transnacional.
En el caso de estas dos compañías, el tema central del debate es el derecho fundamental de los trabajadores a negociar y a acordar condiciones de trabajo y salarios con su empleador.
Lamentablemente, algunas compañías aéreas ignoran cada vez más las reglas establecidas y rechazan negociar y cooperar con sus trabajadores.
El Comité Ejecutivo de la CES expresa su profunda preocupación ante esta evolución en el sector del transporte aéreo en Europa y la carrera a la baja que constatamos actualmente y que afecta a las condiciones de trabajo y los salarios.
La actitud de la dirección de Ryanair y de algunas otras compañías de bajo coste constituye un ataque contra todos los trabajadores en Europa y es un triste ejemplo de cómo destruir el modelo europeo de convenios colectivos.
La evolución negativa en algunos segmentos del sector del transporte aéreo podría convertirse pronto en una realidad en muchos otros sectores, tanto privados como públicos.
Si Ryanair y otras compañías aéreas de bajo coste tienen éxito en sus intentos de socavar las condiciones de trabajo y los convenios colectivos en Europa, cambiarán las perspectivas para todos los trabajadores en Europa, no solo para aquellos del sector del transporte aéreo.
Estos ejemplos ilustran claramente la necesidad urgente de mejorar y adaptar la reglamentación del sector aéreo europeo. Europa necesita reglas comunes para garantizar buenas condiciones de trabajo a todos los trabajadores. ¡Hay que poner fin a esta carrera a la baja!
El Comité Ejecutivo de la CES exige por tanto a las autoridades europeas que revisen inmediatamente las actuales reglamentaciones del sector aéreo, en estrecha colaboración con los interlocutores sociales representativos.