UGT reclama un Plan Nacional de Inclusión Tecnológica para combatir el déficit digital
Fecha: 20 Oct 2017
El déficit digital de España apenas ha cambiado en dos años por la inacción del Gobierno en esta materia. Casi 5 millones de españoles (el 14% de la población) nunca han entrado en internet, y más de 2,7 millones de hogares no disponen de conexión.
La brecha digital persiste por cuestiones de edad, nivel de estudios, renta familiar y lugar de residencia (mientras Madrid, Baleares y Navarra alcanzan cotas de inclusión digital importantes, otras regiones, como Galicia, Castilla-La Mancha o Extremadura, están muy por debajo de la media española y europea). Y aunque ha descendido considerablemente la Brecha digital de Género en el último año, nuestro país ocupa el número 18 de los 28 países de la UE en mujeres que usa regularmente internet.
UGT considera imprescindible un Plan Nacional de Inclusión Tecnológica que incluya entre otras medidas: facilitar la conexión a internet para colectivos vulnerables, con una tarifa mensual menor a 20 euros al mes, y facilitar los recursos presupuestarios suficientes para establecer planes de formación a todos los niveles, en empresas, centros de enseñanza y de formación para desempleados.
La Brecha Digital en España persiste sin merma, con un 14% de la población (4,8 millones de españoles) que nunca se ha conectado a Internet. También permanecen inalterables las diferencias por género, edad, por el lugar de residencia o por renta o situación laboral.
La publicación de la Encuesta sobre equipamiento y uso de tecnologías de información y comunicación en los hogares 2017 por parte del INE y el informe anual sobre La Sociedad en Red Ed. 2017 por el Observatorio Nacional de Telecomunicaciones y Sociedad de la Información (ONTSI), confirman que el progreso de España en términos de inclusión digital es altamente decepcionante.
La Brecha Digital persiste casi inalterable en cualquiera de sus formas; de hecho, estos mismos factores precursores de la exclusión digital siguen vigentes dos años después de nuestro primer estudio (edad, género, geográfica o por hábitat, formación académica, por renta o por situación laboral), sin que los responsables políticos pongan medidas para cerrarla, o al menos, para mitigarla.
Las principales conclusiones del análisis realizado por UGT de ambas publicaciones son las siguientes:
- 4,82 millones de españoles nunca han entrado en Internet (un 14% de la población), porcentaje que crece hasta el 15,4% cuando se reduce el periodo analizado a los últimos tres meses.
- 2,71 millones de viviendas no disponen de conexión a Internet (un 16,6% del total de hogares).
- La Brecha Digital por cuestión de edad sigue siendo muy amplia, de 54 puntos porcentuales entre los seniors (rango entre 65 y 74 años) y jóvenes (16 y 24 años). Con este diferencial, España se sitúa muy por encima de la media europea y la de la OCDE y muy alejada de las principales economías del mundo.
- Mientras los estudiantes presentan un 100% de presencia en internet, el número de parados con acceso a Internet desciende hasta el 86,5%. Sólo la mitad de las personas dedicadas a labores del hogar o los pensionistas se conectan a Internet.
- La renta familiar también es crucial para determinar las posibilidades de exclusión digital: la divergencia llega hasta los 30 puntos porcentuales entre los que disponen de una renta familiar de más de 2.500 euros (97,7%) y los de menos de 900 € (68,4%).
- La formación académica sigue siendo un importante precursor de exclusión digital: la separación alcanza el 47% entre licenciados y personas con educación primaria.
- La Brecha Digital de Género es la que mejor evolución presenta desde 2015, después del repunte negativo de 2016 (de un 3,9% de hombres que se conectaban más que mujeres en 2016 al 1,8% de 2017). No obstante, y a pesar de esta evidente mejora, nuestro país ocupa un indigno puesto número 18 de los 28 países de la Unión Europa en mujeres que usan regularmente Internet.
- El lugar de residencia sigue siendo determinante para la inclusión digital: mientras Madrid, Baleares y Navarra alcanzan cotas de inclusión digital importantes, otras regiones, como Galicia, Castilla-La Mancha o Extremadura, están muy por debajo de la media española y europea. Esta falta de cohesión digital se materializa en todas estas formas:
En viviendas con ordenador, el diferencial entre la primera CCAA (Madrid, 86,5%) con la última (Extremadura, 70,4%) es de 16 puntos porcentuales.
El diferencial entre la que más porcentaje de viviendas con conexión a Internet (Madrid) presenta, y la que menos (Galicia), es de 10,5 pp.
En cuanto al uso de las tecnologías digitales, en términos de personas que usan ordenadores, se trata de la característica que más diferencial presenta, con un 20% entre la primera y la última (Madrid y Extremadura, respectivamente). 1 de cada 4 extremeños nunca usa un ordenador, lo mismo que 1 de cada 5 riojanos, murcianos, canarios, gallegos, asturianos y andaluces: la exclusión digital de las dos castillas dobla las de Madrid o Navarra.
En personas que usan la red de redes, las diferencias se reducen casi a la mitad (un 11,7%, entre los extremos). Madrid es la única que alcanza el 90%, seguida de Baleares y Melilla con un 88%. Galicia y Castilla-La Mancha quedan por debajo del 80%.
En la última década, dos CCAA ha logrado casi duplicar su número de internautas: Extremadura y Melilla (46%), aunque de nuevo este esfuerzo no le sirve a Extremadura para abandonar las últimas posiciones, pero sí le ha servido a Melilla para alzarse al pódium.
Casi 1 de cada 5 gallegos, castellano-manchegos y extremeños nunca se conecta a Internet. La exclusión digital de Castilla-La Macha dobla a la de Madrid (20,5% vs. 9,3%).
Finalmente, el tamaño de la población en la que se reside en determinante: aquellos que viven en ciudades de más de 100.000 habitantes, o capitales de provincia, presentan un 10% de internautas que los que residen en poblaciones pequeñas (menos de 10.000 habitantes).
UGT considera que el tamaño, alcance y persistencia de la Brecha Digital en España es inconcebible para una economía que presume de estar en pleno crecimiento. Esta nueva forma de desigualdad, comparable al analfabetismo de otras épocas, no es compatible con un país que debería cimentarse en la inclusión y la cohesión social.
La Brecha Digital que sufre nuestra población perjudica seriamente al futuro de nuestra Sociedad y a la sostenibilidad de nuestro progreso económico; la transformación digital del tejido productivo que necesita nuestra economía será inviable si una gran parte de nuestra población sigue excluida del universo digital. Sin lugar dudas, la Estrategia Digital del Gobierno será un momento clave para reconducir esta situación.
Con todo, UGT reitera la medida que, para salvar esta situación, es necesario un Plan Nacional de Inclusión Tecnológica, que debería contener, entre otras, las siguientes medidas:
- El establecimiento de un ente público que coordine la transversalidad de las TIC en todo el gobierno, con responsabilidades en todo lo referido a nuevas tecnologías, formación digital y e-inclusión.
- La creación de un Observatorio de la Brecha Digital, con la participación de todos los actores implicados.
- La instauración de planes de formación presenciales y basados en prácticas activas para los colectivos fuera del mundo digital.
- Facilitar la conexión a Internet para colectivos vulnerables con una tarifa mensual menor a 20 euros al mes.
- El establecimiento de recursos presupuestarios suficientes para elaborar planes formativos en empresas, en centros de enseñanza y en centros de formación para desempleados.
Infografía "Persiste el déficit digital por la inacción del Gobierno"