La reforma laboral sólo ha conseguido precarizar las condiciones de trabajo

Fecha: 02 Feb 2016

​El paro del mes de enero vuelve a reflejar el carácter estacional de gran parte del empleo que se crea en España. Un empleo cada vez de peor calidad (del total de la contratación, el 91% de los contratos que se han registrado en este mes son temporales y casi el 31% a tiempo parcial).

Además se está consolidando un trabajo indefinido precario camuflado bajo el contrato de apoyo a emprendedores. Si a esto unimos el efecto desánimo entre los desempleados, el descenso de la tasa de cobertura (que ha pasado del 70,6% en 2011 al 55,19% en 2015), la extensión del paro de larga duración (un 59,5%, según la EPA) y los procesos de emigración forzados a la que se ven abocados muchos de nuestros jóvenes resulta urgente poner en marcha unas políticas de empleo adecuadas.

UGT considera que hay reforzar las políticas activas y de intermediación, que no deben estar orientadas únicamente a subvencionar el sector privado, y establecer recursos adicionales para los Servicios Públicos de Empleo para mejorar la empleabilidad, la formación y lograr la inserción permanente de los desempleados.

Al mismo tiempo, hay que mejorar la cobertura y las prestaciones por desempleo, reponer los derechos de los trabajadores y derogar la reforma laboral, que sólo ha conseguido precarizar las condiciones laborales.

Asimismo, se debe apostar por un modelo productivo basado en la industria, la innovación, la formación y que genere empleos de calidad.

Comienza 2016 con 4.150.755 parados registrados, según los datos publicados hoy por el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) para el mes de enero. Esta cifra supone un aumento mensual de 57.247 personas con respecto a diciembre (1,40%) y en términos interanuales el dato sigue mostrando un descenso del 8,28% es decir, 374.936 parados registrados menos que en el mes de enero de 2015. En términos desestacionalizados la reducción es de 49.552 personas.

  • En este comienzo del año se ha incrementado el desempleo masculino un 0,88% y en mayor medida el femenino (un 1,84%). No obstante, desde enero de 2015 se han reducido ambos (un -11,51% en el caso de los hombres y un 5,39% entre las mujeres).

  • En enero continuaban registrados 338.261 jóvenes. El desempleo entre los menores de 25 años ha descendido un 1,14% mensual (3.916 parados jóvenes menos en este mes) y en términos anuales un 12,12% (-46.671 jóvenes).

  • Por sectores de actividad, el paro registrado en enero aumenta en la agricultura (un 2,01%) y en los servicios (un 2,48%), dando fin a la campaña de Navidad. En el resto se reduce: en la construcción un 1,06%, en la industria un 0,12% y en el grupo sin empleo anterior un 2,45%.

  • En términos anuales desciende en el conjunto de actividades: en el sector agrícola un 13,33%, en la industria un 13,15%, en la construcción un 16,21%, en los servicios un 5,64% y en el colectivo sin empleo previo un 8,75%.

  • Por lo que respecta a los trabajadores extranjeros, el número de desempleados sube en el mes un 0,36% (debido tanto al aumento del paro masculino como femenino), hasta alcanzar la cifra de 488.985 personas, aunque en la variación anual se observa un descenso del 9,98%.

  • El número total de contratos registrados en enero decrece un 12,41% respecto a diciembre, situándose la cifra total en 1.396.929 contratos firmados. Si lo comparamos con los registrados en el mismo mes del año anterior, el volumen de contratos se incrementa un 2,13%: un 4,47% los indefinidos y un 1,90% los temporales. La proporción de indefinidos sobre el total de contratos se sitúa en el 8,9%, sólo una décima por encima que en enero de 2015.

  • En un año, los contratos temporales a tiempo parcial han decrecido un 0,49%, mientras los temporales a tiempo completo han aumentado un 3,01%. Desde enero de 2015 aumenta un 5,20% la contratación indefinida a tiempo completo y un 3,68% la indefinida a tiempo parcial. El peso de los contratos a tiempo parcial sobre el total de contratos es del 30,9%.

  • El contrato para emprendedores aumenta un 6,2% mensual y un 24,2% anual, llegando a 10.242 contratos en enero de 2016.

  • La afiliación a la Seguridad Social se sitúa en 17.104.357 cotizantes, 204.043 menos que en diciembre de 2015 (un -1,18%), debido a la finalización de la campaña navideña con pérdidas en comercio (33.614 cotizantes), actividades administrativas (-29.059) y hostelería (28.482); así como al inicio del ejercicio presupuestario que afecta a sectores como la construcción (pierde 18.985 afiliados) y la industria manufacturera (-12.203). En el año, se han afiliado 529.045 personas más (un 3,19%).

  • El número de beneficiarios de prestaciones cierra diciembre con una nueva caída anual del 11,7%. Persisten los descensos, rebajando la tasa de cobertura al 55,19%, 4,2 puntos menos que un año antes.


Conclusiones

  • UGT muestra su preocupación por las cifras publicadas hoy por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, a pesar de la positiva evolución anual marcada por la recuperación económica. El primer mes del año 2016 muestra, otra vez, la finalización de la campaña navideña y, como consecuencia, un aumento del paro junto a una reducción de la afiliación a la Seguridad Social. Todos ellos indicadores del carácter estacional que tiene buena parte del empleo creado en el país.

  • Por otro lado, UGT insiste en que los mejores resultados del registro del desempleo siguen guardando relación con un efecto desánimo entre los desempleados. El descenso continuado de la tasa de cobertura (del 70,6% en 2011 al 55,19% en 2015) y la extensión del paro de larga duración (cifrada en la EPA del pasado 28 de enero en un 59,5%), junto a los procesos de emigración, podrían ser parte de este “adelgazamiento de las cifras de desempleo”, en especial entre los grupos de jóvenes y de los trabajadores mayores de 55 años.

  • Sigue destacando, por tanto, la cifra de desempleo de larga duración, que unido a la caída de la tasa de cobertura resulta en una necesidad urgente de poner en marcha verdaderas políticas de empleo, que protejan a las personas en desempleo vía prestaciones, combinando las ayudas con políticas activas de empleo, de orientación, formación e inserción.

  • Para UGT las políticas de empleo llevan paralizadas cuatro años. Los cambios normativos y de funcionamiento implantados por el Gobierno, que ofrecen un campo de actuación al sector privado en la intermediación, están suponiendo un deterioro de los servicios públicos de empleo, que cuentan con menores recursos técnicos y humanos para hacer frente a las políticas de empleo. Al mismo tiempo, el Gobierno viene apostando por proyectos que siguen sin dar frutos, es el caso del Plan de Garantía Juvenil, el proyecto de colaboración con Agencias Privadas de Colocación y el Programa de Activación Empleo. En este último caso, UGT viene reclamando una revisión de los criterios de acceso al programa con el fin de mejorar la cobertura (hay que apuntar que se ha ejecutado menos del 19% de los 850 millones presupuestados), puesto que en estos meses de andadura desde febrero de 2015 sólo han resultado beneficiarios menos de 100.000 desempleados, la cuarta parte de lo previsto por el propio Gobierno.

  • Además, resulta necesario reforzar las políticas activas de empleo y de intermediación, que no deben estar orientadas únicamente a subvencionar al sector privado, mediante bonificaciones a la contratación y acceso de las Agencias Privadas de Colocación a la intermediación. Hay que poner en marcha medidas de creación de empleo con recursos adicionales para los servicios públicos de empleo para mejorar la empleabilidad y la formación, y lograr la inserción permanente de los desempleados.

  • En las cifras de contratación, destaca la continua pérdida de calidad en el empleo que presenta nuestro mercado de trabajo. A pesar del aumento de la contratación indefinida (en un año un 4,47%), también sube la temporal (1,90%), y sobre todo hay que considerar que un 91% de los contratos que se han registrado son temporales y casi el 31% a tiempo parcial. A ello se añade un fenómeno que se viene observando: la precarización de la contratación indefinida. Se está consolidando un trabajo indefinido precario, camuflado bajo el contrato de apoyo a emprendedores introducido en la reforma laboral -entre otras modalidades-, que va desplazando a la tradicional contratación temporal, y que muestra unos rasgos muy similares: inestabilidad, bajos salarios y flexibilidad a favor de la empresa.

En última instancia, en términos de empleo la protección social debe garantizarse, mejorando la cobertura y reforzando las prestaciones por desempleo.

Acompañando a esta medida, es imprescindible potenciar las políticas activas de empleo desde el ámbito público, dado que han sufrido las tijeras de la austeridad de manera especialmente acusada.

Asimismo, es preciso reponer los derechos de los trabajadores y derogar en su totalidad la reforma laboral, que sólo ha conseguido precarizar las condiciones laborales. 

Junto a ello, hay que poner en marcha una política económica que apueste por los factores que permiten a una economía crecer a medio y largo plazo, en innovación, formación y conocimiento, logrando aumentos de productividad y competitividad, y que generen empleos de calidad, salvando la estacionalidad, a la vez que reducen las desigualdades y la pobreza.

 

Valoración de Toni Ferrer, Secretario de Acción Sindical de UGT

Fuente: UGT