Hay que reformar ya el mercado eléctrico y subir el SMI
Fecha: 12 Ago 2021
El Gobierno debe intervenir porque la luz se ha convertido en un bien de lujo, inasequible para millones de ciudadanos
► El precio de la luz se ha convertido este verano en un bien de lujo que gran parte de la población apenas puede costear. No solo las personas más vulnerables, sino también los trabajadores y trabajadoras con sueldos más bajos, como los perceptores del SMI.
► Por ello, UGT demanda al Gobierno que acometa la necesaria reforma del mercado eléctrico a fin de garantizar un sistema de fijación de precios más justo y transparente, porque las medidas aprobadas hasta ahora han sido insuficientes; que apruebe con carácter permanente la prohibición de los cortes de suministros de luz, agua y gas en el ámbito doméstico y que incremente el Salario Mínimo Interprofesional, pues lleva ya 8 meses de retraso y los trabajadores y trabajadoras tienen que seguir afrontando la subida del precio de la luz y de otros bienes esenciales.
► Asimismo, insta a los partidos políticos a que abandonen la bronca, piensen en la ciudadanía y se sienten a negociar un Pacto de Estado por la Energía que permita precios más asequibles y competitivos, un elemento fundamental no solo para las economías domésticas, sino también para nuestra industria y el cambio de modelo productivo que necesita nuestro país.
Si julio de 2021 ha sido el mes más caro de la historia en cuanto a la subida del precio de la luz, estos primeros días de agosto siguen pulverizando récords. Así el precio diario de la electricidad marcará este jueves su cuarto récord consecutivo alcanzando los 115,83 euros el megavatio-hora (MWh) la cifra más elevada que se ha registrado hasta ahora. Algo que coincide con la demanda de aparatos de ventilación y aires acondicionados por la ola de calor que estamos sufriendo estos días.
Una de las causas por las que hoy sucede esto es la inacción política, durante años, para acometer una reforma contundente en el sector que establezca un sistema de fijación de precios más justo y transparente. La luz, el gas y el agua son bienes esenciales, deben ser accesibles para todos, a un coste razonable, y, por tanto, no pueden ser fruto de operaciones especulativas propias de empresas privadas.
Sin embargo, los partidos políticos, en ocasiones, parecen estar más preocupados en hacer oposición y deshacer lo que hace el otro que en llegar a acuerdos de Estado en beneficio de los ciudadanos y ciudadanas. Por eso, UGT les insta a que abandonen la bronca partidista y acometan, de una vez por todas, la necesaria negociación para conseguir un modelo energético con precios más asequibles y competitivos, lo que beneficiará a las personas, pero también a nuestra industria y a nuestro sistema productivo.
La facturación eléctrica no ayuda
UGT denunció en su día que el nuevo modelo de facturación eléctrica, aprobado por el Gobierno, con hasta 240 precios distintos para la luz, perjudica a los colectivos más vulnerables, que tienen viviendas menos eficientes y no pueden acceder a aparatos eléctricos con menor consumo; y beneficia a las grandes compañías eléctricas.
En este sentido recuerda que la tarifa más cara se asienta en las horas centrales del día (de 10 a 14 horas y de 18 a 22 horas) con lo cual acciones habituales como poner el aire acondicionado o encender la vitrocerámica o la lavadora suponen un sobrecoste para las economías domésticas.
Además, El 75% de la factura es variable, dependerá de las horas en las que cada persona consuma, por lo que se aumentará de manera generalizada la facturación, lo que afectará de nuevo a los colectivos más vulnerables. UGT ha reclamado implementar la Estrategia Nacional de Lucha contra la Pobreza Energética, con el objetivo de ofrecerles una protección especial.
Este sistema tarifario aumenta también el coste del teletrabajo, que deben asumir las empresas, y de la educación a distancia.
Políticas para las personas
El sindicato exige al Gobierno que no demore políticas para proteger y asegurar el bienestar de las personas. Así:
- Es preciso acabar con la pobreza energética y aprobar definitivamente la prohibición de los cortes de suministros básicos a los más vulnerables. Para ello, es preciso reformar el bono social para que llegue a todo aquel que lo necesite.
- Hay que subir el Salario Mínimo Interprofesional, un incremento que debe hacerse este año y que lleva ya ocho meses de demora. El Gobierno debe cumplir su compromiso esta renta alcance el 60% del salario medio al final de la legislatura.
- Hay que acelerar la modernización del mercado de trabajo para acabar con la precariedad de los empleos e impulsar trabajos estables, de calidad y justamente remunerados.
► Valoración de Mariano Hoya, Vicesecretario General de Política Sindical de UGT