Grecia introduce la jornada laboral de seis días

UGT expresa su rechazo esta nueva medida del gobierno griego, que rema a contracorriente en una Europa partidaria de reducir el tiempo de trabajo

Fecha: 09 Jul 2024

Grecia

El gobierno conservador griego, encabezado por el primer ministro Kyriákos Mitsotakis, introdujo el pasado 1 de julio la semana laboral de seis días, una medida que la Confederación Griega de Sindicatos (GSEE) ya avisa de que tendrá consecuencias nefastas sobre la jornada laboral en Grecia. 

UGT expresa su rechazo a la reforma, que llega a una Europa donde muchos países están buscando la manera de reducir la jornada laboral, y que va totalmente en contra de los valores y objetivos del sindicato. Además, esta nueva medida se implanta en el país donde se trabaja más horas de la Unión Europea: un promedio de 1.886 horas en 2022, frente a 1.726 de media en la Unión Europea. 

La GSEE alerta de que la implantación de la jornada laboral de seis días forma parte de un plan integral para desregular el trabajo, desmantelando la negociación colectiva y debilitando los convenios. El porcentaje de personas trabajadoras cubiertas por convenios (solo un 25,8% frente a un 45,8% de media europea) o la escasez de acuerdos de empresa que prevén un aumento salarial (solo 59 acuerdos en 2023, de 209 que se firmaron) lo corroboran.

La jornada laboral de seis días se podrá implementar en instalaciones industriales y en aquellas empresas que operan por turnos a diario durante las 24 horas. Estas podrán extender la jornada dos horas adicionales al día o un turno adicional de ocho horas. Deberán avisar a los trabajadores con 24 horas de antelación y pagarles un complemento del 40% en la sexta jornada. La intención de esta norma, según el gobierno griego, es facilitar la producción de estas empresas en períodos de mayor carga de trabajo, mientras se mantiene la jornada de cinco días como la norma. 

Sin embargo, las posibles consecuencias de esta medida son nefastas. Según el GSEE, la escasez de inspecciones laborales puede conducir a que las jornadas laborales lleguen a ser de 13 horas diarias. Con ello, la semana laboral de cinco días puede quedar obsoleta, a la práctica. Se trata, en definitiva, de ofrecer barra libre a los empleadores en Grecia, el país con la segunda tasa de desempleo más alta de Europa, donde el 47% de los empleos creados son a tiempo parcial o con horarios rotativos y donde la brecha distributiva no para de aumentar. 

UGT alerta del peligro de esta reforma y apoya la Confederación Griega de Sindicatos (GSEE) en su solicitud de suspender la aplicación del sexto día hábil. Asimismo, recuerda que Grecia no es el único país europeo cuyos dirigentes están apostando por políticas de austeridad, desregulación y, en definitiva, un retroceso claro en derechos laborales. Es necesario permanecer alerta ante esa amenaza.