Es necesario un nuevo modelo económico basado en la sostenibilidad y la justicia social

Para ello es crucial seguir incrementando los salarios y generando incentivos para invertir en actividades de alto valor añadido que respeten el medio ambiente

Los datos de la Contabilidad Nacional Trimestral correspondientes al tercer trimestre de 2024 publicados hoy por el INE registran un aumento trimestral del PIB del 0,8%, un 3,3% en términos anuales, una décima más que el aumento anual del segundo trimestre, y suma la cuarta aceleración consecutiva. Una vez conocido el dato, las previsiones económicas auguran un crecimiento anual para el año 2024 cercano al 3%. 

Los datos positivos sobre el crecimiento del PIB siguen la tendencia de las últimas revisiones anunciadas por otras instituciones en los últimos meses. Las estimaciones para 2024 sitúan el crecimiento esperado del PIB en el 3,1% en el caso del Banco de España. Otros organismos como la Comisión Europea, la OCDE y el consenso de FUNCAS lo han situado en el 3%, por lo que es bastante probable que se supere la cifra de crecimiento del año pasado, que tras la revisión del INE se ha estimado en el 2,7%. 

El crecimiento de la economía española se explica por diferentes factores. El primero de ellos corresponde al impulso del consumo privado, un elemento clave en el crecimiento de la demanda nacional que está relacionado con la moderación de la inflación y con el aumento salarial significativo, sobre todo tras la aprobación del V Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva en mayo de 2023, que ha propiciado que los salarios reales comiencen a recuperar capacidad adquisitiva.  Además, la reforma laboral ha ayudado a que las personas trabajadoras hayan mejorado sus condiciones laborales, con una mayor estabilidad, beneficiando a los trabajadores y a las trabajadoras con menores rentas, lo que en conjunto ha otorgado confianza a los agentes económicos.

Por otro lado, en 2024 se ha producido el cambio de rumbo de la política monetaria que UGT venía exigiendo, empezando una desescalada de los tipos de interés tras dos años seguidos de subidas de tipos; una medida que había constreñido la actividad económica, dificultando las cosas sobre todo a algunos países próximos a la recesión, como Alemania. En este momento, el tipo de interés de referencia ya se sitúa en el 3%, un punto y medio por debajo del máximo que se alcanzó en 2023. Este descenso beneficia al consumo y, sobre todo, a la inversión, dos factores clave para el crecimiento económico. 

Seguir subiendo salarios para aumentar el consumo y el crecimiento 

Otra variable muy relevante que ha tenido su resurgir en 2024 ha sido la inversión, que en el segundo trimestre de este año superó los niveles pre-pandemia por primera vez, sentando los cimientos del crecimiento a medio y largo plazo. Este hecho está muy relacionado con la evolución de los fondos europeos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, que desde 2023 aceleraron su nivel de ejecución y que parece estar llegando a la economía real. Es crucial continuar en este sentido, proyectando en un horizonte reciente el cambio de modelo productivo y generando incentivos para invertir en actividades de alto valor añadido que respeten el medio ambiente. 

En definitiva, el crecimiento económico sigue acelerando y ya supera los pronósticos que se hacían inicialmente sobre el PIB. Sin embargo, todavía es preciso mejorar en la atracción de la inversión privada para atender al nuevo modelo económico que requiere el siglo XXI, basado en la sostenibilidad y la justicia social. Además, es fundamental seguir con una evolución positiva de los salarios reales para que recuperen poder de compra y que, combinado con la bajada de los tipos de interés, tenga efectos muy positivos para la economía española y europea.  

Datos

Los datos definitivos de la CNTR publicados por el INE registran una tasa de variación anual del PIB del 3,3%, frente al 3,2% del trimestre precedente, confirmando una aceleración por cuarta vez consecutiva. Por su parte, la tasa de crecimiento trimestral se ha situado en el 0,8%, al igual que en el segundo trimestre. 

Por el lado de la demanda, el consumo final de los hogares continúa siendo un impulso fundamental del aumento del PIB, con un incremento anual del 3% y una aportación al crecimiento de 1,6 punto. La inversión también crece, aunque en menor medida, con un 0,7%, y aportando 0,3 puntos al crecimiento anual del PIB. De esta forma, la demanda nacional en su conjunto aporta 2,8 puntos al crecimiento, mientras que el sector exterior lo hace en 5 décimas. 

Por el lado de la oferta, todos los sectores económicos registran crecimientos trimestrales interanuales. El sector primario lo hace en un 8,3%, situándose como el sector con más crecimiento, seguido de las ramas industriales (4%), seguido de los servicios (3,5%) y, por último, la construcción (2,4%). Otro detalle relevante de la evolución de la industria es que esta continúa acelerándose en su crecimiento por segundo trimestre consecutivo, lo que supone una buena noticia para un sector crucial en el necesario cambio de modelo productivo que tiene que producirse. 

Por último, en lo que se refiere al empleo, las horas efectivamente trabajadas aumentaron un 0,9% interanual y un 0,2% trimestral. Por su parte, los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo registran un incremento anual en el tercer trimestre del 1,9%, mientras que en términos trimestrales lo hizo un 0,9%. Si comparamos los puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo del tercer trimestre de 2024 con el mismo trimestre de 2023 se observa un aumento de 407.900 empleos. Es muy positivo que el crecimiento económico se refleje en un aumento paralelo del empleo, con una calidad cada vez mayor, lo cual a su vez impulsa el incremento de la actividad económica.

 


Fuente: UGT