El único objetivo legítimo es la paz en Ucrania: No a la guerra
Fecha: 21 Ene 2022
La Unión General de Trabajadoras y Trabajadores expresa un claro y nítido NO A LA GUERRA en el conflicto entre Rusia y Ucrania y reclama a la Unión Europea que llame a la calma, el diálogo y reivindique su autonomía a la hora de gestionar esta situación
Si por un lado el gobierno ruso ha recurrido nuevamente a la estrategia militar para desplegar su agenda política en zonas próximas a su territorio y que entiende de su exclusiva influencia, lo que supone una inaceptable amenaza a la estabilidad y seguridad de Ucrania, el interés de Estados Unidos y otros países de la OTAN en extender su área de influencia militar hacia el este tampoco parece la más inteligente manera de no provocar un estallido que ahonde más en un conflicto que lleva ardiendo casi diez años en el interior de Ucrania.
Este “tira y afloja” en el que distintos peones del tablero geopolítico tienen intereses que en nada benefician al conjunto de la clase trabajadora (siempre víctima, por otra parte, de las guerras), se juega a las puertas de la Unión Europea, vecina de Rusia y de Ucrania, y que debe hacer un llamamiento claro y convencido por la paz y el diálogo y alejarse de los intereses belicistas de Estados Unidos o Rusia y los aliados de éstos.
Nunca es buen momento para jugar a la guerra. Éste, desde luego, tampoco. El mantenimiento de la paz es una obligación perenne de cualquier Estado y más aún de los que forman parte de un proyecto político como la UE, que nace del más ferviente de los propósitos contra la guerra. Para UGT, la Unión Europea, debe llamar de inmediato a la calma, al diálogo y a reivindicar autonomía sobre cómo gestionar su política de vecindad. El fortalecimiento de la democracia, la defensa de los Derechos Humanos o la promoción de la justicia social es la única de las guerras que la UE puede y debe llevar a cabo, desde la no injerencia y, siempre y absolutamente, desde la paz.
Los conflictos fronterizos entre ambos países deben resolverse mediante la vía diplomática de forma pacífica. Por ello, UGT rechaza cualquier tipo de amenaza militar por parte de Rusia, así como las estrategias de la OTAN de militarización de Ucrania; y recomienda a España que se abstenga de participar en cualquier tipo de acción bélica, ya sea como actor o como coadyuvante, y volcar su enorme potencial negociador, su prestigio y valor internacionales en rebajar la tensión y hacer una llamada a la calma y al diálogo, y hacer valer su peso en la UE para que ésta se aleje de los tambores de guerra que otros hacen sonar a sus puertas.