Hay que luchar contra las desigualdades y la pobreza por la vía del aumento de salarios
Fecha: 19 May 2016
El Secretario General de UGT, Pepe Álvarez ha manifestado hoy que los datos publicados hoy en el informe de la OIT, vienen a ratificar las posiciones que defendidas por las organizaciones sindicales, por un lado porque el Salario Mínimo Interprofesional está por debajo de lo que se reconoce como el umbral de la pobreza, por lo tanto, las personas regidas por este indicador, que cada día son más en nuestro país, en realidad no tienen el mínimo vital para poder subsistir y por otro lado, porque si no hay aumento de salarios no va a aumentar el consumo interno y ni se creará empleo.
Álvarez ha señalado que “todos los análisis de carácter internacional ponen de manifiesto la gravedad de la situación actual debido a que el reparto de la riqueza no se está haciendo de manera equilibrada”, y, en este sentido, ha añadido, “sería muy importante que el Gobierno español tuviera en cuenta las recomendaciones de la Unión Europea en cuanto a que el SMI esté en el entorno del 60% del salario medio, poco más de mil euros. Algo que se puede hacer paulatinamente, pero para lo que no podemos esperar mucho”.
Pepe Álvarez ha apuntado además que tal y como están los salarios hoy, va a ser difícil poder mantener saneada la Seguridad Social, por lo que será necesario, en primer lugar, restablecer el Pacto de Toledo y a partir de aquí, actuar por la vía de la mejora de los salarios, pero además, el Estado tendría que hacerse cargo de una parte de los costes que no son imputables directamente a las pensiones.
Sentencia sobre representatividad sindical
Preguntado por los medios sobre la sentencia de la Audiencia Nacional sobre la hegemonía de UGT y CCOO a la hora de negociar convenios colectivos en grandes empresas, el Secretario General de UGT ha advertido que “son los trabajadores los que deciden quién tiene que negociar. Ni los jueces, ni los sindicatos, los propios trabajadores con sus votos”.
“En nuestro país hay una legislación que sitúa claramente cuándo un sindicato es representativo y cuándo tiene que negociar o no, y en este caso, en el marco de la empresa, han hecho una interpretación con la que no estoy de acuerdo y que si se trasladara a una perspectiva general sería lo mismo que intentar cargarse la negociación colectiva”.
“A nadie se le ocurre pensar que un partido político que no llega a un nivel de representatividad, esté en un lugar en el que se requiere un nivel de representatividad” ha explicado, “por tanto, intentar desvirtuar la representatividad de UGT y CCOO es lo mismo que atacar al principio del derecho de negociación de los propios trabajadores”.