Es esencial reforzar la senda de aumentos salariales y facilitar el acceso a la vivienda

El sindicato advierte de que la evolución de la inflación comienza a ser preocupante y el contexto geopolítico amenaza con generar nuevas tensiones sobre los precios

Los datos del IPC de enero, publicados hoy por el INE, sitúan la inflación anual en un 2,9%, una décima más respecto a diciembre, y encadena cuatro aumentos consecutivos, alcanzando el valor más alto desde el pasado mes de junio. 

En esta ocasión este repunte se explica, principalmente, por el encarecimiento mensual de los carburantes (+3,4%), frente a la bajada del 0,2% experimentada un año atrás; y la electricidad (+11,4%), cuyo aumento se ha acelerado respecto a hace 12 meses (+9,4%) En cuanto a la inflación subyacente, que recoge la inflación de componente más estructural, disminuye dos décimas con respecto al mes anterior, con una variación anual del 2,4%. 

Entre los incrementos anuales más destacados durante este mes, destaca el chocolate (24,9%), la electricidad (20,5%), los paquetes turísticos (12,4%) y el café (9,8%). En sentido contrario, el aceite de oliva (-21,9%), el transporte de pasajeros por tren (-20,9%) o el azúcar (-14,9%) registran los descensos de precios más señalados.

Aunque todavía se mantiene en tasas moderadas, lo cierto es que la evolución de la inflación comienza a ser preocupante, no solo porque ya muestra una tendencia creciente y se está alejando de los niveles de referencia del 2%, sino porque el contexto geopolítico amenaza con generar nuevas tensiones sobre los precios, derivadas de las crecientes restricciones comerciales vía aranceles impuestas por el gobierno de Trump en EEUU. El escenario, por tanto, resulta muy preocupante, y puede impactar muy negativamente sobre el bolsillo de los hogares, especialmente de los más vulnerables.   

Por ello, para UGT resulta esencial reforzar la senda de aumentos salariales, fuente de ingresos fundamental de las familias trabajadoras. En este sentido hay que destacar el positivo acuerdo entre los sindicatos UGT y CCOO con el Gobierno para aumentar el SMI de 2025 un 4,4%, hasta los 1.184 euros al mes en catorce pagas, continuando con el objetivo de alcanzar, como mínimo, el 60% del salario medio, tal y como recomienda la Carta Social Europea. No obstante, el sindicato lamenta no sólo que no se haya mantenido la exención de tributación en el IRPF de las rentas equivalentes al SMI, sino la escasa transparencia con la que se ha adoptado esta medida, por lo que reclamamos la apertura inmediata de un proceso de negociación social que permita abordar en profundidad esta cuestión.

Urge blindar la función social de la vivienda 

En materia de negociación colectiva, la subida salarial media pactada se sitúa en el 3% en el mes de enero, en línea con los criterios del V AENC, que contempla también subidas adicionales de hasta un 1% en caso de que el IPC supere dicho 3%; un escenario que, hasta ahora, parecía muy improbable, pero que, con el panorama internacional mencionado, no puede descartarse en absoluto.  

Además, la mejora de las rentas salariales no solo es necesaria para proteger el poder de compra de la población trabajadora ante los aumentos del IPC, sino para facilitar también el acceso a la vivienda, cuyos precios siguen una tendencia especulativa totalmente ajena a la evolución de la economía productiva y de la situación financiera los hogares. Así, es esencial blindar la función social de la misma para garantizar su acceso a las personas trabajadoras, de modo que puedan desarrollar proyectos de vida dignos y estables.

 


Fuente: UGT