​El Secretario General de UGT, Cándido Méndez, ha afirmado que la prioridad del nuevo Gobierno tiene que ser “centrar todos sus esfuerzos en desarrollar políticas que permitan aumentar la cantidad y calidad del empleo, que está ahora muy deteriorado, y luchar decididamente contra las desigualdades”.

Cándido Méndez ha realizado estas declaraciones previas a una asamblea de delegados y delegadas de UGT en Palma de Mallorca, donde ha señalado que “estamos en un escenario completamente distinto a los anteriores. Ha habido dos partidos emergentes que han entrado con mucho empuje y estamos en un escenario social, sindical y político que exige un nuevo aprendizaje”.

“Nosotros vemos con interés y con expectativa el proceso de investidura, a partir de que se ha superado una situación de bloqueo que no tenía sentido. Para nosotros no es tanto el quién sino cuáles van a ser los objetivos fundamentales de esa política de Gobierno. El PP ha sido el partido más votado, con 7 millones de votos, pero hay 15 millones de personas que han votado a otros partidos políticos y que han enviado un mensaje inequívoco de cambio. El Gobierno que surja debe propiciar un cambio en profundidad”.

“Es necesario hacer un llamamiento a las formaciones políticas que encuentren coincidencias en sus programas, que hagan un esfuerzo supremo para que se pueda definir un programa de Gobierno y un Gobierno que lo lleve adelante, que reponga derechos y sea capaz de abordar un proceso de negociación muy complicado, que es la negociación con Bruselas, donde suenan de nuevo tambores de guerra y se habla de nuevo de recortes”.

“Hay que tejer alianzas con otros gobierno europeos  e iniciar una negociación con Bruselas de forma tal que el objetivo de déficit público sea supeditado al crecimiento económico y la creación de empleo, que sería la mejor manera de reducir el déficit público”.

En relación a nuestro país, Cándido Méndez ha señalado que las políticas urgentes a desarrollar serían “la elevación de la cuantía del SMI, que en España tiene una cuantía ridícula, avanzando en un sendero hasta los 800 euros en 2017; y reconocer una prestación de ingresos mínimos, que sea de 426 euros pero que se aumente en función del número de miembros de la unidad familiar y se reconozca como un derecho subjetivo y universal y la duración sería mientras se mantenga un riesgo de exclusión y pobreza. Hay mayoría parlamentaria suficiente para aprobar esta prestación”.

Además, Cándido Méndez ha considerado que el nuevo Gobierno debe “devolver a los trabajadores las herramientas que ha debilitado y deteriorado el Gobierno del PP. Por ello, resulta imprescindible derogar la reforma laboral del 2012 y la reposición de los derechos expoliados, como el derecho a la negociación colectiva, que ha provocado la devaluación salarial, la precariedad laboral y explotación de trabajadores. Esta reforma ha sido un acicate para que se produzcan ilegalidades en el plano laboral”.

También ha manifestado la necesidad de derogar el art. 315.3 del Código Penal, “que se ha utilizado en esta legislatura para atentar contra el ejercicio del derecho de huelga. Hay 300 representantes sindicales que están amenazados injustamente en su libertad por haber ejercido este derecho”.