El Gobierno debe implementar más políticas de protección social y reanudar su programa social

Fecha: 12 Mar 2021

El consultorio semanal de UGT analiza los cambios acaecidos en este año de pandemia


La Unión General de Trabajadores ha dedicado hoy su consultorio semanal monográfico a analizar y hacer balance sobre este primer año desde que se inició la pandemia bajo el título “Un año de pandemia, ¿Qué ha cambiado?”.

En esta ocasión, el consultorio, que se ha emitido en la web www.ugt.es a partir de las 12.00 horas, ha contado con la participación del Secretario General de UGT, Pepe Álvarez, que ha realizado un balance a cerca de lo que se ha hecho durante el año de pandemia y lo que queda por hacer; Laura Muñoz, Secretaria del sector de residencias de la Federación de Empleados y Empleadas de los Servicios Públicos de UGT Madrid que ha analizado lo ocurrido en las residencias públicas y Esteban Ramos, responsable del sector de comercio de la Federación de Servicios, movilidad y Consumo de UGT País Valenciano, que ha abordado la situación del comercio en esta Comunidad, una de las que ha tomado medidas más restrictivas.

Además, Martín Hermoso, técnico del Servicio de Estudios Confederal, ha respondido a las dudas que han llegado a través del WhatsApp (682403638) habilitado con el fin de aclarar las preguntas de la ciudadanía.

El trabajo de los sindicatos ha sido clave

El Secretario General de UGT, Pepe Álvarez, ha definido este año de pandemia como un “año horrible, sobre todo pensando en las personas que han perdido algún familiar o en quienes han sufrido o sufren la enfermedad” y, en el ámbito laboral, ha querido poner en valor el papel de los sindicatos durante estos meses en los que “se ha hecho un trabajo muy importante”.

“Desde el primer momento optamos por tratar de llegar a acuerdos e intentar cubrir las necesidades de las personas, una tarea que no ha sido fácil, pero si en lugar de los ERTES hubiéramos optado por los despidos, como se hizo en 2008, seguramente hoy tendríamos dos millones de parados, fundamentalmente mujeres, más de los que tenemos y la puesta en marcha de la economía se habría realizado con mayores dificultades. Sin embargo, todo ha sido poco. Nos hemos quedado muy cortos”.

Pepe Álvarez ha señalado que “El Gobierno tiene que poner en marcha nuevas políticas para paliar el hambre que hay en nuestro país, la miseria en la que está viviendo mucha gente o la propia situación sanitaria e intentar no continuar como estábamos, ya que muchos de los problemas que hemos tenido han sido consecuencia de la falta de previsión, la no intervención del Estado o la falta de medios materiales y humanos para atender a las personas”.

“Es necesario hacer un replanteamiento general en muchos aspectos y poner en marcha todo lo que se paró en el mes de marzo, también nuestras reivindicaciones y reanudar nuestro programa relacionado con la subida del SMI y la derogación de las reformas laborales o de la reforma de las pensiones de 2013, entre otras muchas cuestiones. Si queremos avanzar, tendremos que combinar la negociación con la movilización, no podemos perder la oportunidad que representa un Gobierno de izquierdas con un programa reformista así como los millones de recursos públicos procedentes de la UE que deben ser utilizados para crear más empleo, empresas más competitivas con mayor valor añadido” ha añadido.

Las residencias: el año más duro

Laura Muñoz, Secretaria del Sector Autonómico de la Federación de Empleados y Empleadas Públicas de UGT Madrid, ha subrayado que “hace un año no estábamos preparados para lo que se nos venía encima, la gente no estaba preparada y desde luego los centros residenciales tampoco. Las personas mayores no eran una prioridad para la sociedad y mucho menos para la Comunidad de Madrid”.

“Nos hemos sentido muy abandonados, tanto las personas mayores de las residencias como los trabajadores de las mismas. Los protocolos de sanidad de la Comunidad de Madrid han sido desastrosos y los trabajadores y trabajadoras nos hemos encontrado con una desinformación y una falta de medios angustiosa y hemos tenido que hacer frente a muchos fallecimientos con la carga emocional y psicológica que ello conlleva. Por ello la vacunación ha supuesto un alivio grandísimo” ha explicado.

“Si volviera a suceder, podríamos decir que los trabajadores y trabajadoras sí que están ahora más preparados, pero el problema de este sector es que con la precariedad y la temporalidad de los contratos, probablemente, no estarían las mismas personas que han adquirido esta experiencia, algo muy grave, en el empleo público. Por lo menos esta situación ha servido para incorporar a la agenda social el debate sobre el modelo de atención que queremos para nuestros mayores, cosa que antes de la pandemia ni si quiera existía” ha añadido.

Situación del comercio en la C. Valenciana

Esteban Ramos, responsable del sector de comercio de la Federación de Servicios, movilidad y Consumo de UGT País Valenciano ha destacado que “el año ha sido y sigue siendo muy duro y las restricciones en la Comunidad Valenciana siguen siendo muy estrictas lo que está afectando mucho a las ventas, sobre todo al pequeño y mediano comercio o al comercio centrado en un turismo inexistente”.

“Lo que no sabemos es lo que va a llegar, y si las ayudas van a ser suficientes, veremos cómo evoluciona el consumo y quien puede sobrevivir o no a esta etapa. Gran parte del comercio ya se ha reinventado y lo que se ha observado es que el pequeño comercio debe volver a sus inicios, a la cercanía, la especialización y dar lo que las grandes superficies no dan”.

Fuente: UGT