8M: el movimiento sindical europeo e internacional centra sus reivindicaciones en acabar con la violencia

UGT, socio fundador de la Confederación Europea de Sindicatos y de la Confederación Sindical Internacional, junto con el resto de las organizaciones sindicales exigen de ratificación la Convención 190 de la OIT y seguir mejorando leyes, servicios y procedimientos para combatir este problema.


La Unión General de Trabajadorees, junto a la ETUC y la Confederación Sindical Internacional (CSI) exigen este 8M que se trasponga ya el convenio 189, sobre el Trabajo decente para las trabajadoras y los trabajadores domésticos, así como que todos los Gobiernos ratifiquen el Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo, que entrará en vigor este año. Este último es el primer estándar laboral internacional en abordar la violencia y el acoso en el trabajo.

UGT subraya la necesidad indicada por Esther Lynch (Secretaria General Adjunta de la ETUC) de crear ambientes de trabajo post-COVID que estén totalmente libres de violencia y acoso, unos problemas absolutamente inaceptables que afectan de forma especial a muchas mujeres. Esto deja al descubierto de nuevo la incapacidad, por parte de las políticas de las empresas y de los métodos de prevención, de adaptarse a la realidad provocada por el COVID.

Según la encuesta llevada a cabo por ETUC entre mujeres líderes de sindicatos de 21 países diferentes, solo el 16% de ellas indica que los empleadores han actualizado sus políticas para afrontar el acoso online asociado al teletrabajo.

Únicamente un 16% opina que su legislación nacional es lo suficientemente fuerte como para paliar la violencia y el acoso en el trabajo y solo un 17% cree que esta se hace cumplir de forma adecuada. Finalmente, un escaso 23% piensa que los empleadores hicieron lo suficiente para aplacar la violencia y el acoso en el trabajo.

El sindicato señala, sin embargo, que tanto los Gobiernos como los empleadores miembros de la OIT se comprometieron (y están obligados) a mejorar las leyes, los servicios y los procedimientos para prevenir y terminar con la violencia y el acoso laboral.

UGT y sus análogos internacionales, expresan su deseo de que una mayor cantidad de empleadores trabajen junto a las organizaciones sindicales para actualizar sus políticas de manera que estas den respuesta a las nuevas realidades creadas por el COVID y, de este modo, prevenir la violencia y el acoso en el trabajo.

Otras demandas del sindicato, así como de la ETUC y del CSI, son el establecer una protección social universal con perspectiva de género, derechos laborales equitativos para hombres y mujeres e invertir en cuidados para conseguir la igualdad de género efectiva.

Finalmente, la Comisión Europea ha presentado su propuesta de directiva sobre transparencia salarial, algo que llevamos esperando desde hace tiempo.

Fuente: UGT