38 millones de personas trabajadoras, sin vacaciones este verano

Un estudio de la Confederación Europea de Sindicatos (CES), de la que UGT forma parte, revela que más de 38 millones de personas en Europa no pueden permitirse una semana de vacaciones a pesar de trabajar. La crisis del coste de la vida está presionando a las personas trabajadoras, que cada vez declaran más dificultades para llegar a fin de mes, lo que aleja aún más la posibilidad de unas vacaciones


El estudio, realizado a partir de datos de Eurostat trabajados por el Instituto Sindical Europeo (ETUI), señala que la proporción de la población que no puede permitirse unas vacaciones ha aumentado en más de la mitad de los Estados miembros desde 2019 e, incluso, la proporción de trabajadores y trabajadoras en esta situación ha aumentado en 11 países.
Rumanía, Grecia y Lituania son los Estados con mayor número de personas empleadas que no pueden ausentarse durante una semana. Italia (8 millones), España (4,6 millones) y Francia (4,1 millones) son los países con mayor número de trabajadores y trabajadoras que se quedan sin vacaciones por motivos económicos.

Esto coincide con un aumento de la cuota de beneficios de las empresas europeas y significa que los directivos y accionistas han estado ganando más dinero para sí mismos a expensas de las personas trabajadoras.

Es imprescindible un aumento de los salarios

Para la CES, Es muy probable que el número de personas en situación de pobreza en esta zona aumente aún más debido a la crisis del coste de la vida y a la inflación, lo que subraya la necesidad de un aumento salarial decente este verano para los trabajadores de toda la UE.

La CES reclama medidas urgentes para hacer frente a la emergencia salarial en Europa. La UE y los gobiernos nacionales también deben apoyar a sus empleados desplegando los medios necesarios para mitigar el impacto de la crisis de los precios de la energía y los alimentos y apoyar los ingresos.

En respuesta a los resultados del análisis, la secretaria general adjunta de la CES, Esther Lynch, ha señalado que "es verano, pero la vida no es fácil para millones de trabajadores que no pueden permitirse unas vacaciones en familia a pesar de trabajar duro semana tras semana. Las vacaciones no deben ser un lujo. Por el contrario, tienen un importante papel que desempeñar en la salud y el bienestar de los trabajadores. A pesar de ello, las vacaciones parecen más lejanas que nunca para muchas personas que se enfrentan a una crisis del coste de la vida y que ya tienen dificultades para poner comida en la mesa y pagar el alquiler".

Mientras tanto, ha afirmado que “la vida es buena para los empresarios que han aprovechado la pandemia para embolsarse una parte aún mayor de los beneficios generados por sus trabajadores. La creciente desigualdad en las vacaciones demuestra que la economía europea no funciona para las clases trabajadoras”. Por ello, ha considerado que “es responsabilidad de la UE y de los gobiernos nacionales proteger y reforzar la negociación colectiva como la mejor forma de garantizar que los trabajadores reciban su parte justa y puedan permitirse disfrutar de la vida en lugar de limitarse a sobrevivir. Sin un aumento salarial justo, los empresarios y los políticos volverán de sus propias vacaciones de verano para enfrentarse a un otoño de ira seguido de un invierno de descontento".


► Tabla: "Porcentaje de la población total y trabajadora de todos los países que no puede permitirse unas vacaciones" 

► Tabla: "Número estimado de personas trabajadoras de todos los países que no pueden permitirse unas vacaciones"

► Página web de la Confederación Europea de Sindicatos (CES)


Fuente: CES